Bennu, el asteroide próximo a la Tierra de unos 490 metros de diámetro, ha sido captado por la nave espacial OSIRIS-Rex en su versión más cercana a la misma. La imagen ha plasmado el relieve así como la estructura externa del planetoide más precisa vista hasta el momento, según el medio Newscientist.
Una escena que fue capturada el pasado 13 de junio cuando la nave espacial transitaba por el espacio en su segunda órbita alrededor de Bennu y que permitió descifrar la apariencia de este mucho más que en diciembre de 2018, cuando se acercó a 1.3 millas (1.3 millas) del asteroide.
Engranaje que divide la figura en dos partes diferenciadas, siendo una iluminada por la luz solar y otra que permanece en la oscuridad representando una cara más opaca.
Los primeros hallazgos identificaron el interior del asteroide con una estructura llena de agua formada por cantos rodados y cuevas que recubren las superficie. Por el contrario, a diferencia de otros elementos, Bennu contiene minerales hidratados que almacenan agua también en su estructura molecular.
Sobre el origen del asteriode, algunos científicos relacionan la existencia de otro artefacto de mayor dimensión que se separó y dio lugar a este engendrado hace aproximadamente dos mil millones de años.