Aunque Daniel Sancho lleva dos semanas en prisión, aun no conoce la rutina de los presos comunes puesto que está en un módulo de enfermería, unas condiciones muy distintas de un preso común.
Nuestro reportero Jorge Luque, desde Tailandia ha podido hablar con un hombre de 43 años que conoce bien la cárcel y es que ha estado más de dos años en este lugar. Su testimonio nos ayuda a saber lo qué hay de verdad y de mentira de lo que se cuenta de estas cárceles tailandesas.
Este expreso nos asegura que han llegado a dormir 400 presos en la misma celda, duermen tres juntos en la misma colchoneta. El día comienza para ellos a las 6 de la mañana con el himno del país sonando por magáfonos, a las 7 llega la hora del desayuno, a las 12 la comida y a las 16 el turno de la cena. Cualquier información del exterior está completamente censurada, lo único que se emite en las pantallas es alguna pellicula de vez en cuando y en tailandés.
El contacto físico con personas del exterior también está completamente prohibido, en Tailandia no existen los vis a vis. El tabaco, el alcohol, y otros estupefacientes también están prohibidos. Una extricta rutina diaria a la que tendrá que acostumbrarse Daniel Sancho mientras tenga que estar en esta cárcel.
Además, Miquel Valls ha explicado la situación de Daniel hasta el momento en la cárcel: "Tiene el dinero que cada día le ingresa su familia, él no está comiendo la comida de la cárcel. Cada día, hasta en dos ocasiones se pide comida del exterior a una empresa que le proporciona. Está comiendo el plato típico tailandés y dice que está delicioso".
Luis Romero, abogado y portavoz asignado por la familia de Edwin Arrieta en España ha hablado sobre esto: "Lo que quieren es que se haga justicia no tenga un trato de favor".