‘Cuatro al día’ ha repasado las espectaculares imágenes de la policía interrumpiendo un ritual neochamánico, un rito que estaba a punto de dar comienzo. Se trata de una operación conjunta de Policía Nacional, Agencia Tributaria y la inspección de Trabajo.
Estos ritos se llevaban a cabo en Sant Pol de Mar, en Barcelona y se promocionaban en redes sociales y páginas web. ‘Una escuela donde la maestra es el amor’, reza uno de los títulos de su pagina en internet. “para nosotros es fundamental lo que se transmite más allá de ls palabras mediante la energía del amor”, aseguran.
En estos rituales ofertaban sustancias psicoactivas como ayahuasca, sapo bufo, rana cambo y mezcalina. Una forma de engañar a los clientes para poder captarlos. Los agentes entraron en el momento clave, la ceremonia estaba a punto de dar comienzo. Veintitrés personas se habían reunidos en la casa y todos pretendían ingerir estas sustancias.
Los organizadores ofrecían camas para alojar a los asistentes. Durante los registros, los agentes intervinieron 4.000 euros y 2.000 dólares en efectivo. El resultado de la operación, dos personas detenidas a las que se les acusa de varios delitos: pertenencia a grupo criminal, contrabando, trafico de drogas e intrusismo laboral.
Un equipo de ‘Cuatro al día’ conseguía hablar en exclusiva con Sergio Sanz, uno de los detenidos en la operación policial, y, además, lo hacía en la casa donde se había producido dicha operación.
“Fue un susto, además este allanamiento es ilegal porque la ayahuasca no está fiscalizada, está bajo el pretexto de que la ayahuasca es toxica cuando ya se ha demostrado que no”, comenzaba defendiéndose Sergio mientras, poco a poco, subía la tensión en la entrevista.
El detenido, que acababa de salir de dependencias policiales, cargaba contra la prensa y se enfrentaba duramente contra los colaboradores del programa, tanto, que Ana Terradillos tenía que intervenir para cortar la entrevista:
“Sergio, ¡hasta aquí! Creo que todo el mensaje que estás lanzando a la opinión pública no es el correcto. Tus actividades, la verdad, es que no me han convencido… sobre todo porque hay dinero y una bascula para pesar y vender drogas y sustancias tóxicas. Y a mí me toca como medio de comunicación decir a la gente que esas cosas son malas. No es periodismo sectario, es periodismo científico”.