El caso Diatlov continúa inquietando a los investigadores: las claves del trágico suceso en plena Guerra Fría

El uno de febrero de 1959 un grupo de experimentados montañeros desapareció sin dejar rastro en el corazón de los Montes Urales, en Rusia. Tras varios días sin recibir noticias de ellos, las autoridades pusieron en marcha un operativo de búsqueda que pretendía localizarles con vida. Sin embargo, el 26 de febrero una sombra negra en el paraje helado ofrecía el peor de los augurios. Se trataba de la tienda de la tienda de campaña donde los desaparecidos se habían guarecido.

Estaba destrozada, como si la hubieran destrozado desde dentro huyendo de algo que debió provocarles un miedo atroz. Tras seguir la marca de sus huellas que se perdían en un bosque cercano, encontraron los dos primeros cadáveres junto a los restos de una hoguera. Estaban descalzos y mostraban abrasiones en los brazos y en el rostro, como si hubieran intentado subir a un árbol escapando de alguien o de algo.

En los días posteriores aparecieron el resto de miembros del grupo, todos habían muerto de manera violenta. Costillas rotas, fisuras en el cráneo, contusiones producidas por objetos romos o lenguas cortadas fueron algunos de los detalles que aparecieron en los detalles de las autopsias.

Tortura y radiación en los cadáveres: las incógnitas del caso

Con la noticia del suceso en los medios de comunicación, varios vecinos de la zona reportaron la visión de misteriosas luces en los días previos a la desaparición que algunos relacionaron con objetos voladores no identificados e incluso con pruebas nucleares secretas. Esta última idea podía explicar el hecho de que en el cuerpo y en la ropa de algunas de las víctimas se encontraran restos de potasio 40 que duplicaban los considerados como niveles seguros.

Además, el investigador oficial del caso aseguró haber recibido presiones para finalizar con el caso pese a no estar cerrado. En la actualidad, más de medio siglo después, las autoridades rusas han pretendido dar carpetazo al asunto con una hipótesis final: la de que una avalancha sorprendió a los jóvenes mientras estaban en el interior de la tienda de campaña provocando su huida hacia una muerte segura. Claro que, esta versión no da respuesta a muchas de las claves del caso: