En este segundo programa de la temporada, Iker Jiménez y Carmen Porter han inaugurado una de las nuevas secciones de ‘Cuarto milenio’: ‘In situ’. Se trata de un espacio en el que Iker Jiménez y Carmen Porter visitan emblemáticos enclaves del misterio para efectuar investigaciones en primera persona sobre el terreno.
El lugar elegido para esta primera investigación ‘in situ’ no es otro que el antiguo convento de Santa Catalina de Almagro, actual Parador Nacional. Este emblemático enclave ha sido el escenario del primer aislamiento de Iker y Carmen, un lugar en el que, en sus propias palabras, “han tenido la sensación de estar junto a una presencia”.
Cuando se llevó a cabo la restauración del convento de esta localidad de Ciudad Real, aparecieron diversos enterramientos anómalos, algo que se cree está directamente relacionado con los extraños sucesos que los trabajadores del convento (ahora hotel) relatan por decenas.
Encuentros con sombras misteriosas, sonidos inquietantes, muebles que cambian misteriosamente de lugar… Iker Jiménez y Carmen Porter, en compañía de Aldo Linares y otros miembros del equipo, han podido comprobar desde el propio lugar que hay motivos para temer los pasillos y habitaciones del edificio.
Iker y Carmen, no sin cierto respeto, se atrevieron a pasar parte de la noche entre las paredes de este misterioso lugar, un lugar en el que tendrían lugar sucesos inexplicables y que los presentadores han podido vivir en primera persona.
El aislamiento tenía lugar la noche del pasado 30 de agosto. Iker ocupaba la habitación número 38 y Carmen justo la contigua, la número 39. Los presentadores estaban en todo momento conectados mediante auriculares con el resto del equipo, un grupo de expertos capitaneado por Javier Pérez Campos.
Iker comenzaba el aislamiento tranquilo, incluso algo escéptico, pero el presentador no tardaba en hacer saltar las alarmas del equipo: “Iker está justo mirando hacia el armario donde Aldo Linares percibe algo, no puede ser una coincidencia”.
Cuando Javier Pérez Campos preguntaba a Iker, este contestaba asustado: “El armario que tengo aquí a la izquierda no me gusta nada, así que no me jodáis, si es algo de ahí no me lo digáis porque no quiero decir lo que pienso”.
Aldo Linares, con Iker ya algo más calmado, le explicaba lo que acababa de pasar: “¿Recuerdas, Iker, que has pedido una señal? Pues había una mujer junto al armario justo cuando tú lo has mencionado”.
Desde la habitación de al lado, la número 39, Carmen Porter también percibía algo: “Siento como una especie de respiración cerca de mí, y también he escuchado como alguien desde el pasillo decía mi nombre”.
Hasta tal punto llegaba la sorpresa de Iker, que el presentador de ‘Cuarto milenio’ llegaba a preguntarle a sus compañeros si todo se trataba de una broma.
Iker Jiménez no ha sido el único que ha vivido una experiencia paranormal en el Parador Nacional. El edificio era un convento franciscano y sus trabajadoras cuentan algunos fenómenos que han vivido allí.
Pero no son las únicas: los huéspedes también los han vivido en su propia piel.