Antonio mató a su mujer asfixiándola con unos cordones y se deshizo de su cuerpo transportándolo con una maleta. Fue condenado a 20 años pero ¿Contó con ayuda?
El matrimonio de Antonio y Rosario era aparentemente normal. Se casaron en el año 2000 y tuvieron una hija que, en el momento del asesinato de Rosario, tenía nueve años.
Se cree que el matrimonio podría estar atravesando una crisis y que ella estaría iniciando una nueva relación. El día en el que sucedió todo, Antonio acudió a su domicilio y, según su versión, se vio superado por una discusión.
Antonio habría matado a su mujer asfixiándola con unos cordones y, según datos de la investigación, habría introducido su cuerpo en una maleta que habría transportado a un lugar a 20 minutos de su casa junto a un arroyo seco.
Las autoridades creen que el crimen estaba preparado pero, según Antonio, esto no fue así. Tiempo después, celebró la comunión de su hija e incluso llegó a denunciar a su mujer por abandono del hogar.
Con el paso del tiempo se lesionó y acabó confesando el crimen. Sin embargo, Antonio era una persona con movilidad reducida, lo que hizo pensar que necesitó ayuda para deshacerse del cuerpo.
Lo cierto es que se encontró ADN de Antonio pero también de una tercera persona que, sin embargo, nunca se llegó a identificar.
Finalmente, fue condenado a 20 años, una sentencia que se redujo por su colaboración.