Irina Rybnikova, campeona nacional rusa de lucha, ha muerto este fin de semana a los 15 años de edad electrocutada después de que su móvil cayera a la bañera en la que se encontraba. Ocurrió en Bratsk, en la región de Siberia, mientras la atleta se encontraba cargando su teléfono a la corriente de su casa.
Los padres encontraron el cuerpo de Irina sin vida en la bañera, según ha informado el medio Gazeta.ru. La Federación Rusa ha querido despedirse de la luchadora con un comunicado en las redes sociales en la que lamentan la muerte de la joven. "Un trágico accidente ha costado la vida de nuestra campeona, amiga y estudiante Irina Rybnikova, 15. Que descanse en paz", publicaba la federación.
Rybnikova era una de las luchadoras más prometedoras de Rusia, formaba parte del equipo nacional de luchar y había logrado proclamarse campeona de pancracio, una disciplina de las artes marciales que proviene de la antigua Grecia y en el que está permitido el uso de cualquier tipo de parte del cuerpo.