Jeremy, luchador de Muay Thai, sufrió el lunes pasado una dolorosa y aparatosa lesión por un codazo en la frente. Jeremy colgó la imagen en sus redes sociales en la que se le podía ver la frente hundida por el impacto del codazo. Una imagen que duele nada más verla.
Afortunadamente, Jeremy se encuentra mucho mejor pero en proceso de recuperación y ha colgado una foto tras la operación en la que se le puede ver con un aspecto como el que tenía antes. El luchador lleva ahora una placa de titanio y no tiene daños cerebrales.
El luchador quiso seguir peleando tras el impacto, pero el árbitro detuvo la pelea para que el doctor observara el golpe y decidiera si podía continuar. Jeremy tuvo que abandonar el combate con el buen criterio del doctor.