La delegación japonesa invitada por ‘Volando voy’ a conocer las virtudes del aceite de las Sierras Subbéticas pudo ver en primera persona cómo es el proceso de fabricación de este producto. Nuria Yáñez, la directora técnica de almazaras de la Subbética, fue la encargada de enseñárselo.
“La clave del aceite virgen extra reside en un proceso muy sencillo completamente mecánico sin ningún producto añadido y hay hacerlo a mucha velocidad. Según sale la aceituna del árbol se hace el proceso”, explicó Calleja. El tiempo ideal entre la recolección y el comienzo del proceso de fabricación son “entre dos y cuatro horas”, según Nuria.
Los japoneses no dejaron de asombrarse en todo momento y no soltaron el teléfono móvil. Pero el momento cumbre llegó cuando recibieron las botellas de aceite de ‘Volando voy’.