Jesús Calleja y su equipo de ‘Volando Voy’ viajan hasta Las Lagunas de Ruidera, en Ciudad Real. En tierras de La Mancha conocen a Heidi, un vecino que emociona a Calleja al reivindicar la vida en el pueblo y transmitir su amor por él.
Las Lagunas de Ruidera en Ciudad Real llevan fascinado a Calleja desde pequeño, según confiesa el presentador en el estreno del programa junto a los vecinos de las localidades de la zona.
Uno de estos vecinos, conocido como Heidi, comparte su historia con el presentador de ‘Volando Voy’. En su juventud, se fue diez años a trabajar a Suiza, pero llegó un momento en el que, según cuenta, el médico le detectó “nervios en el estómago” y le recomendó volver a su pueblo natal.
Desde entonces, Heidi confiesa a Calleja que no ha vuelto a salir de su localidad: “Mi pueblo no lo cambio por ningún pueblo. Esto es una maravilla”, exclama mientras sobrevuela sus calles e incluso su huerto en el helicóptero de ‘Volando Voy’.
A bordo, Heidi no puede contener las lágrimas al pensar en la vida en su pueblo y, sin pretenderlo, hace una reivindicación que emociona a Calleja: “Me gustaría que aquí en el pueblo hubiera más trabajo del que hay. Para que los jóvenes no se fueran fuera, y estuvieran aquí en su pueblo. Que lo supieran apreciar. Lo que hay”.
“Eres todo lo que significa ‘Volando Voy”, pronunciaba Jesús Calleja, emocionado, al escucharle a su lado en el helicóptero.