Jesús Calleja comenzaba esta aventura en tierras gallegas, presentándonos a Mari Carmen y a su hija, Coté. Para Mari Carmen, el mar es su vida, es una mujer que lleva toda la vida dedicándose a recoger percebes y es lo único que sabe hacer. Su hija Coté, aunque le hubiera gustado ser cantante, se ha criado viendo a su padre trabajando en el mar y a su madre de percebeira y lo lleva en las venas, por lo que también se dedica a recoger este preciado crustáceo.
Mari Carmen no está nada acostumbrada a las cámaras de televisión y no sabía como colocarse frente a la cámara. Se quedaba rígida, mirando de frente de manera robótica y Jesús y su hija se empezaban a reír.
Esta gallega, cuenta a Jesús Calleja que durante toda su vida ha sido percebeira. Repasando todos esos años, nos relataba el percance más grave que recuerda mientras recogía percebes a sus 63 años mientras seguía trabajando: "Estaba recogiendo percebes por allí y había un agujero, de pronto vino una ola y me tiró al agujero". Coté confirmaba a Jesús que, en ese momento, se puso a gritar como una loca porque pensó que su madre había muerto y que se le había llevado el mar. Desde que pasó eso, Coté obligó a su madre a dejar de recoger percebes: "Era muy peligroso y tenía 63 años".
Para finalizar, el presentador de 'Volando voy', preguntaba a Mari Carmen por su marido y le contestaba: "Mi marido también está jubilado". Jesús Calleja al escuchar esto, suspiraba aliviado y decía entre risas: "En 'Volando voy' nos pasa siempre una cosa, cada vez que pregunto por un marido, está siempre muerto. Enterráis a los hombres, dejadles en paz".