Belmonte ha sido el lugar elegido para el gran estreno de la novena temporada de ‘Volando Voy’, donde se ha celebrado el Campeonato Mundial de Lucha Medieval, un evento que mueve a miles de aficionados de todo el mundo.
Jesús Calleja ha llegado hasta esta localidad de Cuenca para conocer todo sobre este lugar de Castilla-La Mancha y sumergirse en el mundo mendieval de la mano de todos los habitantes de este pueblo. Desde Vido, Lola y Marivi, las hermanas que han mostrado al presentador cómo es hablar 'Madroñero' hasta Mari Carmen, una recreadora histórica a la que no se le escapa ningún rincón de este maravilloso lugar.
"Me ha encantado el vuelo que he hecho hasta aquí, vengo con el helicóptero, viendo esos campos verdes, amarillos, las amapolas. Empiezo a pensar en El Quijote, veo los molinos de viento. Llegar aquí y ver un pueblo que no llega a los 2.000 habitantes, que se multiplica por diez, que la gente local empieza a tunearse con vestidos del medievo, que aparecen luchadores que vienen a competir en el Campeonato Mundial de Lucha Medieval de 23 países, estamos muy impactados", entonada Calleja al aterrizar en Belmonte.
Lo que no sabía era los momentos tan divertidos que iba a vivir durante su estancia en esta localidad y es que aseguraba "que nada más llegar aquí se encontró con tres mujeres un tanto especiales", haciendo referencia a Vido, Lola y Mariví, con las que vivía un divertido momento entre sus calles de Belmonte: "Os veo muy guapas, pero os falla el zapato que no le veo muy bien del medievo".
En medio de la conversación con ellas tres, llegaba otro de los vecinos al que estas tres mujeres le presentaban a Jesús: "Muchos días te veo con la moto". Lo que no sabía el presentador es que con la moto se refer´ñia al helicóptero. Y mientras, ellas explicaban el idioma 'Madroñero' inventado por ellas: "Hemos modificado palabras a nuestro gusto".
"Tengo la radio dada", decía Jesús Calleja mientras hablaba sobre esta lengua con Vido, Lola y Mariví y añadía: "¿Este señor viene con vosotras? Es como una radio porque estamos hablando hay de fondo algo que te habla, voy a apagar la radio, espere, un momentín". Momento que desataba las risas de los presentes y de todo el pueblo al revivirlo.