Esta semana, el equipo de 'Volando voy' capitaneado por Jesús Calleja ha llegado hasta las Merindades, en Burgos, zona en la que se encuentra Monasterio de Santa María de Rioseco.
Los vecinos y voluntarios llevan tiempo tratando de reconstruir este patrimonio tan importante y 'Volando voy' se ha embarcado en la aventura de la rehabilitación de su jardín renacentista del siglo XIII.
Una vez allí, Jesús Calleja ha podido conocer a tres de las personas que tuvieron 'la culpa' de que que este proyecto saliese adelante. Esther López es una profesora de historia del arte jubilada y es parte fundamental de este ambicioso proyecto: "Es un patrimonio único y estuvo a punto de desaparecer", nos cuenta.
Ángel, otro de los voluntarios, asegura que este tesoro estuvo a punto de desaparecer y que estuvo prácticamente oculto durante años: "Vinimos y no podíamos entrar en el monasterio porque estaba todo cubierto de maleza".
Juanmi llegó hasta el pueblo para convertirse en el cura y decidió rehabilitarlo nada más ver las pésimas condiciones en las que estaba la iglesia que hay dentro: "Empezamos a poner los suelos y a enterrar de nuevo los huesos", nos explica.
Allí al lado también hemos podido conocer a Demetrio Fuente, un hombre de 80 años que trabaja de sol a sol como voluntario, y a su mujer, María Ángeles Dasilva, que curiosamente nació prácticamente en el monasterio.