Desde luego, estamos en la temporada del año de mayor acumulación de videojuegos de conducción. Su hace unos días os hablábamos de las virtudes de Project Cars 3, ahora le toca el turno a WRC 9, la novena entrega del videojuego oficial del Campeonato del Mundo de Rallies. La saga ha ido ganando en popularidad y calidad año tras año y llega con algunas mejoras. La entrega de este año repite muchas de las cosas que nos gustaron en entregas anteriores, y algunas de su pegas también.
Por supuesto, estamos ante el juego oficial del Campeonato Mundial de Rallies, por lo que es posible disfrutar aquí de todas y cada una de las pruebas del Mundial, todos sus trazados, con todos sus coches y con todos sus pilotos y equipos. Y podemos hacerlo, en la edición de este año, en un buen puñado de modos de juego, tanto para un jugador como en multijugador. Por supuesto, tenemos los clásicos Carrera única, entrenamiento, zona de pruebas, el Modo Carrera, pero también hay nuevas incorporaciones muy interesantes, como el Modo Clubes o el Modo Coches Clásicos.
Por supuesto, el centro del juego vuelve a estar en el Modo Carrera, en el que puedes configurar a tu propio piloto y hacerlo crecer, junto a su coche y su equipo, a través de toda una temporada del Mundial, o más allá. Además, puedes crear una partida directamente en el WRC o, si quieres más tiempo de juego, en el mundial WRC Junior, creando una joven promesa. Una vez cumplas los objetivos de una temporada en esta modalidad, podrás dar el salto con tu piloto a la categoría reina del Mundial.
Todo comienza con una prueba de pilotaje, y así el juego te ofrecerá una experiencia basada en tus dotes de conducción. Pero, además, tu luego puedes personalizar los ajustes de juego, activando y desactivando ayudas, para conseguir tu experiencia de juego perfecta. Esto es de mucha ayuda y permite que disfrute de WRC 9 cualquier tipo de jugador. Una vez realizada la prueba, podrás elegir equipo, coche y patrocinadores. Y aquí comienza tu carrera en el Mundial.
Lo mejor del Modo Carrera es que puedes decidir en casi cualquier aspecto sobre la vida del equipo. No solo tendrás que preocuparte en conducir y hacerlo lo mejor posible. El centro neurálgico de este modo es la sede central de tu equipo y aquí tendrás que estar pendiente de todo: diseñar el calendario de trabajo para programar entrenamientos, pruebas y hasta los días de descanso para el quipo; ir añadiendo mejoras en el departamento de I+D (que viene a ser un árbol de habilidad donde podemos ir añadiendo puntos que desbloquearán mejoras); gestionar el equipo contratando mejores técnicos, mecánicos, agentes, ingenieros y hasta a los fisioterapeutas; administrando el correo electrónico donde llegarán ofertas y proposiciones; administrar los objetivos del fabricante, consultar las estadísticas, etc.
Gestionar bien todos los aspectos del equipo te ayudará a mejorar en los entrenamientos, en las pruebas de los constructores, lo que te hará ganar reputación ante los equipos, los fabricantes y los patrocinadores. Todo ayuda a mejorar tu carrera. Pero, entre todas estas actividades, en el calendario se irán colando las pruebas de los diferentes rallies del mundial.
Pero, si lo tuyo es sentarte a conducir y no quieres gestionar nada del equipo, puedes elegir el modo temporada. Aquí podrás competir en todos los rallies del Mundial sin preocuparte del equipo. Sólo, entrena, practica y compite por ser el mejor.
Los desarrolladores de KT Games han intentado llevar la conducción a un punto más alto de realismo con la entrega de este año. Y lo han hecho atendiendo al feedback recogido de muchos pilotos del mundial. La física de los vehículos y el realismo de los trazados añade un punto extra de desafío al juego, que aunque ajustes los controles para recibir múltiples ayudas, sigue siendo un título difícil de dominar. Lamentablemente, nos hemos encontrado con algunos fallos en la física de los vehículos, en su conducción y, sobre todo, en los impactos con los bordes de las pistas o cualquier obstáculo en el camino.
Estos errores, presentes también en entregas anteriores, hacen que WRC 9 sigue un peldaño por debajo de otros simuladores modernos. Aunque en muchos momentos la conducción se siente realista, hay muchas ocasiones en las que el coche se descontrola sin motivo aparente, es imposible mantenerse en la pista o sufrimos accidentes inverosímiles. Y eso llega a ser molesto en algunas ocasiones.
Pero eso no quiere decir que el juego no pueda disfrutarse. Y hay que decir que algunos apartados nos han sorprendido para bien, como la gran variedad y realismo en la recreación de las diferentes sedes del mundial y el realismo del audio. No en vano, en WRC 9 se han vuelto a grabar de cero todos los sonidos de todos los motores de todos y cada uno de los coches del mundial. Y el resultado es sorprendente. También escucharemos las indicaciones del copiloto (aunque estas están en inglés).
Otro de los puntos fuertes a nivel de realismo es el Sistema de Clima Dinámico que añade este año WRC 9. Las condiciones climatológicas cambian de manera dramática, a veces, y eso añade un punto de realismo muy atractivo. Además, el clima afecta a la conducción y nos obligará a tomar decisiones tácticas en carrera.
Una buena idea para hacerse con los mandos, practicar y hacer ajustes en las opciones de conducción para terminar haciéndonos con el juego es acudir, además de los tutoriales de entrenamiento, al modo Zona de Pruebas. Este modo es genial, porque podemos elegir todos los parámetros posibles y lanzarnos a conducir de manera libre por un trazado. Como si se tratara de un juego de conducción abierto, sin tiempos ni penalizaciones. Así, podemos elegir una zona de mapa del Rallie de Gales, elegir el momento del día y las condiciones climatológicas (podemos marcar, por ejemplo, que comience despejado pero que avance hacia una poderosa tormenta) y después elegir cualquier coche disponible de todas las categorías (WRC, WRC 2, WRC 3, WRC Junior, Leyendas y Bonificación) para lanzarnos a conducir a nuestro libre albedrío. Y lo mejor es que podemos ir ajustando los parámetros de conducción y ayudas en tiempo real.
La entrega de este año añade tres nuevos rallies con respecto al juego del año anterior. Así, además de disfrutar de las pruebas de siempre en Suecia, Argentina, Portugal, Montecarlo, México, Italia-Cerdeña, Finlandia, Turquía… podrás competir en los rallies de Kenia, Nueva Zelanda y Japón. Y en cuanto a coches, además de todos los oficiales, volvemos a tener coches de Leyenda (un total de 15), todos esos modelos que han hecho historia en el Mundial y otros cuantos coches de Bonificación, modelos ajenos al campeonato pero que permiten una experiencia de conducción distinta (prueba un trazado helado del Rallie de Suecia a los mandos de un Porsche 911 Carrera, por ejemplo).
Una vez hayas dominado la conducción y hayas triunfado en los modos carrera o temporada, hay un buen puñado de modos en WRC 9 que multiplican las horas de diversión para los fans de los rallies. Hay un interesante Modo Desafíos, que te plantea retos muy interesantes con determinados vehículos, trazados y condiciones de carrera. Pero la auténtica novedad de este año es el Modo Clubes, donde puedes crear tu propio Club o unirte a u n club ya creado por otro aficioando o grupo de aficionados en la red. Dentro de uno de estos clubes se pueden crear tus propios campeonatos y mucho más.
En cuanto a las opciones multijugador también son muchas. Puedes participar en partidas rápidas o rallies completos con jugadores reales a través de la red o participar en los desafíos online que propone el juego. Además, WRC 9 volverá a activar en pocas semanas su competición de eSports oficial y, quién sabe, tal vez puedas participar en ella.
WRC 9 cuenta con todo lo bueno de sus entregas anteriores en una edición bastante continuista que añade algunas mejoras, como nuevos rallies, nuevos modos de juego y un buen puñado de nuevos coches y opciones. Tiene tantos modos de juego que asegura muchos meses de diversión. Aunque a nivel técnico, tanto en el realismo de sus coches y su conducción, como su potencia gráfica está todavía un poco por debajo de otros simuladores.