Probamos la nueva Nvidia Shield 2019
Nvidia actualiza su centro de entretenimiento para TV con dos modelos más asequibles.
Si todavía no sabes lo que es Nvidia Shield tienes que ponerte al día, porque se trata de una fabulosa opción para los que quieren un 'set top box', o un Android TV, para disfrutar de todos sus productos multimedia en la TV, y además expandir esa experiencia al gaming con un mismo dispositivo. El gigante de las tarjetas gráficas lanzó hace años este concepto, unido estrechamente a su servicio de juego en streaming GeForce Now, lo que convertía al dispositivo en prácticamente una potente videoconsola para los amantes de los juegos de PC. Cada dos años, hemos tenido modelo actualizado y tocaba en 2019.
La Nvidia Shield 2019 llega en dos modelos, el sencillo que ha recibido un cambio radical en su diseño, y el modelo Pro, que renueva con un diseño parecido al del modelo anterior. Ambas vienen con un nuevo mando a distancia (Shield Remote) mucho más completo y robusto incluido y llegan con precios más asequibles que los modelos anteriores, incluido el modelo Pro (pero es verdad que ya no incluye el mando de juego, Shield Controller, que hay que adquirir por separado.)
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La principal de sus diferencias está en su interior, ya que añaden algo más de potencia con el procesador Nvidia Tegra X1+ (2 Gb de RAM en el modelo sencillo y 3Gb en el Pro) y el re-escalado por IA de Nvidia, esta última la principal de sus nuevas características. Así, los nuevos modelos permiten resoluciones de hasta 4K HDR con upscaling mejorado por IA. También llegan con compatibilidad con Dolby Vision HDR y Dolby Atmos.
La principal de las diferencias de los modelos de este año la protagoniza el modelo sencillo de Nvidia Shield. Su diseño nos ha llamado mucho la atención, con esa original forma de pequeño cilindro que encierra todo. De hecho, el diseño está pensado para ‘hacer desaparecer’ el dispositivo, para que sea una extensión del cable HDMI y quede oculto tras el mueble de la TV. Una vez conectado, no necesitarás tocarlo físicamente para nada (antes asegúrate de equiparlo con una tarjeta MicroSD de generosa capacidad).
Eso sí, al reducir dimensiones se pierden algunos elementos que sí incluye el modelo Pro y que también tenía la carcasa del modelo sencillo de otros años, como los USB. El modelo Pro cuenta con dos, por lo que puedes ampliar su almacenamiento interno (500 Gb SHDD) con USB’s 3.0. El modelo sencillo permite expandir sus 8Gb solo mediante tarjetas MicroSD.
El modelo sencillo es un poco menos potente y con menos almacenamiento que su correspondiente modelo de años anteriores, pero es verdad que también es notablemente más asequible. Ahora puedes tener una Nvidia Shield por 159 euros. Si te convence más el modelo Pro tendrás que pagar 219 euros.
En cuanto al nuevo mando a distancia que incluye, ha sido mejorado de forma exponencial, tiene un tamaño más grande y robusto y cuenta con muchos más botones, uno de ellos programable por le usuario. El Shield Remote de modelos anteriores era extremadamente sencillo, tal vez demasiado, y poco se podía hacer con él excepto navegar por la interfaz del dispositivo. Este nuevo mando a distancia es más serio y puede hacerse así un hueco entre los mandos a distancia de nuestro salón. Además, incluye una opción para buscarlo con la voz si no lo localizamos o se ha caído entre los cojines del sofá.
Además, el mando sigue incluyendo un micro con el que podemos hacer búsquedas por comandos de voz y utilizar todas las opciones que nos ofrece Google Assistant, que viene incluido en Android P (como en la versión con Android 7 del modelo anterior). Esto te da acceso a controlar todos los dispositivos del hogar compatibles con esta tecnología. Y también es compatible con Alexa. ¡Ah!, y no hay que olvidar que tiene un ‘Chromecast’ encerrado en su interior, por lo que actúa como tal y tiene todas sus características.
Por supuesto, aunque estos nuevos modelos parecen más enfocados al streaming, los contenidos multimedia y el control total de todos tus dispositivos del hogar a través de la TV, los videojuegos siguen muy presentes en Nvidia Shield. El hecho de que el Shield Controller se venda por separado (entes venía incluido en el modelo Pro) es ya una declaración de intenciones, pero recuerda que los mandos de Xbox One o PS4 son compatibles, por lo que el mando de Nvidia no es obligatorio. Eso sí, es uno de los mejores mandos de juego que he probado jamás, por su exquisito diseño y por su ergonomía. Podemos seguir accediendo al servicio de juegos en la nube GeForce Now, a la tienda de juegos de Android y a todos los juegos de nuestra cuenta de Steam.
En conclusión, hay que decir que el nuevo modelo de Shield 2019, sobre todo en su modelo sencillo, es una fantástica opción para todo aquel que quiera un dispositivo potente y sencillo pero enfocado a las plataformas de streaming y el acceso a aplicaciones más que a los videojuegos. Ha sido optimizado y llega con un precio bastante bueno y hay que destacar la calidad que ofrece con Dolby Atmos, Dolby Vision HDR y la tecnología de re-escalado por IA. Pero, si lo que más te interesa es la vertiente jugona, tal vez tengas que decidirte por el modelo Pro, mucho más potente pero algo más caro.