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Razer anunció sus nuevos portátiles Blade 16 y Blade 18 el pasado mes de febrero durante el CES de Las Vegas, dos nuevos modelos con pantallas mediana y muy grande que incluían el procesador Intel Core i9 HX de 13ª generación y gráficas de NVIDIA RTX de la serie 40. Dos nuevos ‘buques insignia’ en la gama de portátiles de la marca (estos días se ha anunciado que se añade a la gama el modelo Blade 14, con un diseño más compacto con su pantalla de 14 pulgadas).
Hemos tenido la suerte de pasar unas semanas con un Razer Blade 18 en cesión, el más potente, completo y más grande de la nueva gama y, qué podemos decir, que queremos casarnos con él. El portátil combina el rendimiento de un ordenador de sobremesa con el diseño portátil de un laptop, un poco grande sí, con su increíble pantalla de 18 pulgadas y 240 Hz, pero un portátil al fin y al cabo. Con gráficos potentes, procesadores de última generación y una pantalla impresionante, el Razer Blade 18 es el compañero perfecto para tus aplicaciones más exigentes y, sobre todo, tus videojuegos.
El modelo que hemos podido disfrutar es el más alto de gama, el que incluye una tarjeta gráfica NVIDIA GeForce RTX 4090 con TGP total y un procesador de 13ª generación Intel Core i9-13980HX (24 núcleos), 1,8 GHz con Turbo Boost hasta 5,6 GHz, y 24 MB de caché. También puede adquirirse en otras configuraciones (con un Intel Core i9-13950HX (24 núcleos), 1,8 GHz con Turbo Boost hasta 5,5 GHz y 24 MB de caché y con tarjetas gráficas 4060, 4070 y 4008) y con distintas configuraciones de memoria DDR5 y configuracioens de almacenamiento, lo que reduce su precio. Pero no mucho, piensa que el más modelo con todos los componentes más altos de gama supera alegremente los 5.000 euros. Aquí va el resto de especificaciones técnicas:
QHD+ de 18" a 240 Hz, 16:10 (2560 x 1600)
2 TB SSD (M.2 NVMe PCIe 4.0 x4)
1 TB SSD (M.2 NVMe PCIe 4.0 x4)
1 TB + 1 TB (2 TB) PCIe® 4.0 NVMe™ M.2 SSD
64 GB DDR5-5200MHz
16 GB DDR5-5600MHz
32 GB DDR5-5600MHz
RGB en cada tecla con tecnología Razer Chroma y reconocimiento de teclas simultáneo
Wireless Wi-Fi 6E AX211 (IEEE 802.11a/b/d/e/g/h/i/k/n/r/u/v/w/ac/ax/az), Bluetooth® 5.3
Panel táctil mejorado de vidrio con controlador táctil de precisión de Microsoft
3 puertos USB 3.2 de 2.ª generación tipo A
1 puerto Thunderbolt 4™ (USB 3.2 de 2.ª generación) tipo C con suministro de alimentación y Display Port 1.4 con salida GPU Nvidia
Compatible con cargadores USB tipo C de 20 V con PD 3.0, hasta 100 W
1 puerto USB tipo C 3.2 de 2.ª gen. (compatible con DisplayPort a través de dGPU)
Compatible con cargadores USB tipo C de 20 V con PD 3.0, hasta 100 W
RJ45 - 2,5 Gb Ethernet
Salida HDMI 2.1
Lector de tarjetas SD UHS-II
Matriz de 6 altavoces (2 agudos, 4 subwoofers)
3 amplificadores inteligentes
Puerto combinado de 3,5 mm para auriculares/micrófono
Micrófono de matriz integrado
THX Spatial Audio
Compatibilidad con códecs 7.1 (mediante HDMI)
21,90 mm x 275,40 mm x 399,90 mm
0,86" x 10,84" x 15,74"
3,10 kg / 6,80 lbs
Batería integrada recargable de polímero de iones de litio de 91,7 Whr
Como ya hemos dicho, este Razer Blade 18 destaca por varias características únicas que lo convierten en el portátil más potente y más grande de Razer hasta ahora. Sus gráficos de última generación ofrecen un rendimiento excepcional para juegos y aplicaciones intensivas, sus procesadores ofrecen un rendimiento de alta velocidad y eficiencia energética para manejar tareas exigentes, su imponente pantalla QHD de 18 pulgadas proporciona una experiencia visual inmersiva y de estrema calidad y cuenta con un sonido envolvente gracias a los 6 altavoces THX Spatial Audio que encierra su enorme chasis de aluminio.
Hay que decir que el tamaño del Razer Blade 18 puede llegar a ser un problema, sobre todo si tienes la intención de moverlo mucho. No cabe en las mochilas o bolsas convencionales, así que tendrás que hacerte con una extra grande si quieres llevarlo contigo, si soportas cargar con su peso y el de su enorme fuente de alimentación. Pero es que si queremos disfrutar de su impresionante pantalla hay que pasar por el aro de un dispositivo de un tamaño excesivo. Pero ya hemos dicho que este portátil tiene alma de sobremesa y eso se paga. Además, su diseño de aluminio parece súper resistente. Eso sí, nos ha llamado la atención que Razer no haya incluido un teclado numérico en un espacio tan enorme. El teclado parece ridículamente pequeño enmarcado en una superficie tan grande, pero eso sí, es extremadamente cómodo, las teclas responden a la perfección con un tacto extraordinario y cuentan con iluminación RGB programable con el software de Razer Chroma.
Otro punto a favor que encontramos en su cuerpo son la gran cantidad de conexiones que lo hacen compatible casi con cualquier dispositivo o conexión: tres puertos USB 3.2 tipo A y dos puertos USB tipo C, de los cuales uno de ellos es un puerto Thunderbolt 4 con suministro de alimentación y Display Port 1.4 con salida GPU (el otro también es compatible con DisplayPort a través de dGPU). Además, cuenta con una salida HDMi y un lector de tarjetas SD UHS-II.
Para terminar de hablar de su diseño, tenemos que decir que, aunque pesado es extremadamente equilibrado, pero tendrás que apoyarlo siempre en una mesa para trabajar con él o ponerte a jugar, nada de tenerlo sobre las rodillas. En la parte inferior de su cuerpo vemos un diseño pensado para la refrigeración de este ‘monstruo’. Hasta cuatro rejillas dejan ver los 3 enormes ventiladores que quedan muy separados de la superficie de la mesa con unas patas gruesas y bastante altas. Pero es que, además de los ventiladores, el Razer Blade 18 cuenta con una cámara de vapor extragrande, la más grande creada por Razer hasta el momento, lo que consigue lograr una máxima eficiencia térmica. El sistema utiliza unos tubos de calor y una cámara sellada para disipar el calor de manera eficiente y mantener el portátil fresco durante largas sesiones de uso intensivo. Eso sí, nadie te librará del sonido intenso de los tres ventiladores funcionando a pleno rendimiento. Hay momentos que parece que el portátil fuera a despegar, pero es el precio para mantener la máquina a una temperatura adecuada.
A nivel rendimiento el Blade 18 es una auténtica ‘máquina de matar’ y no hay ningún juego en el mercado que no pueda mover y optimizar al máximo su NVIDIA NVIDIA GeForce RTX 4090 y su procesador Intel Core i9-13980HX. Nosotros hemos puesto a prueba al equipo con juegos de todo tipo como The Last of Us Parte I (tras su último gran parche de actualización), Marvel Spider-Man Miles Morales, MotoGP 23, Call of Duty Modern Warfare 2, Cyberpunk 2077… La frecuencia de actualización de 240Hz de su pantalla ofrece un rendimiento increíble en juegos deportivos o en shooters online que requieren no perder ni medio frame de vista para lograr ser competitivos. Conseguimos tasas que no pasaron de 60fps en MotoGP 23, en torno a los 105fps en Cyberpunk 2077 y de hasta 135fps en The Last of Us Parte I, todos ellos con los gráficos en modo Ultra.
En cuanto al audio, el portátil también ofrece una extraordinaria respuesta. Cuetna con 3 amplificadores inteligentes y 6 altavoces integrados (2 de agudos y 4 para las frecuencias graves). Esto, unido a la compatibilidad con THX Spatial Audio ofrece una extraordinaria experiencia de sonido tanto para juegos, películas o música. Eso sí, hasta que los tres ventiladores se ponen a girar a pleno gas (algo que ocurre enseguida cuando comienzas a jugar). Entonces necesitarás ponerte los auriculares para seguir disfrutando del audio cinematográfico integrado.
En cuanto a la duración de la batería, no es una sorpresa decir que la autonomía no es excesiva si vas a jugar a juegos exigentes y quieres estar lejos de un enchufe. En nuestras pruebas, jugando durante una tarde, la batería sólo nos dejó olvidarnos de la fuente de alimentación un poco más de dos horas (tal vez dos horas y cuarto). Como ya hemos dicho, si te vas de casa no olvides llevar contigo la enorme y pesada fuente de alimentación. Por supuesto, si tu jornada se reduce a trabajo con aplicaciones más livianas, la autonomía de la batería se incrementará notablemente.
El Razer Blade 18 es un portátil muy grande con unos niveles de rendimiento muy grandes también. Puede que no sea para todo el mundo, pero sí para esos profesionales del sector de los videojuegos o que trabajen con exigentes aplicaciones de edición de imagen y vídeo. Si no quieres un sobremesa, aunque quieres un rendimiento similar, pero prefieres tener un elegante y enorme portátil sobre tu escritorio, puede ser una excelente solución. También siu necesitas moverte con un equipo exigente para probar videojuegos muy exigentes en cualquier parte o continuar tu trabajo artístico allá donde vayas sin perder potencia y rendimiento. No es cómodo, pero lo puedes llevar contigo. El problema puede ser su alto precio (que va desde los 2.800 hasta los 5.100 euros).