Hace un par de días que una cuenta atrás anunciaba a los jugadores de Fortnite que algo gordo iba a pasar. Esa cuenta aparecía sobre una bóveda descubierta en Loot Lake y, tras 24 horas, todos los fans se reunieron para asistir a la sorpresa que deparaba el final de la cuenta atrás. Tras llegar a cero, todos salieron volando a una extraña dimensión donde se les pedía que eligieran entre un buen número de armas ya desaparecidas en el juego. Tras la abrumadora elección de la Drum Gun (que vuelve al juego) todos salieron despedidos para aterrizar de vuelta en el mapa habitual. Pero algo estaba pasando: el volcán había entrado en erupción.
Esta erupción volcánica ha creado un enorme lago de lava y algunas de las rocas ardientes que salieron despedidas del mismo, aterrizaron en algunas zonas causando devastadores destrozos. El más significativo es uno de los lugares predilectos de la comunidad para aterrizar al inicio de la partida: Picos Picados. Las torres han quedado destruidas, exceptuando el edificio central.
La Temporada 8 de Fortnite está a punto de terminar.