Análisis de Kena: Bridge of Spirits, una preciosa aventura para PS5, PS4 y PC
La aventura de exploración, combate y plataformas de Ember Lab brilla en PS5, pero también en PS4 y PC
Todavía muchos recuerdan cuando fue presentada PlayStation 5 en su evento especial allá por el 2019. Muchos fueron los videojuegos que, de forma muy llamativa, supieron captar las miradas de aquellos futuros compradores y que ahora en su mayoría son poseedoras de la nueva consola de Sony. El nuevo Ratchet & Clank: Una Dimensión Aparte, Spider-Man: Miles Morales o este Kena: Bridge of Spirits fueron algunas de las grandes sorpresas junto al sorprendente e innovador diseño elegido para la consola. Ha pasado un largo tiempo desde que vimos por primera vez esta obra de Ember Lab, además de un ligero retraso de un mes en su lanzamiento que impacientó aún más a los jugadores.
Hoy, podemos hablaros de nuestra experiencia jugando dentro del mundo de Kena, donde debemos acompañarla en una aventura de gran color, que saca pecho del poderío técnico de PlayStation 5, así como de PlayStation 4 y PC. Una epopeya llena de magia, diversión y una gran experiencia donde actuar como guía espiritual y poder llevar prácticamente de la mano a los difuntos hacia el más allá. Todo esto acompañado de un bonito mensaje, una dificultad bien establecida y que demuestra que la paciencia ha merecido y mucho la pena.
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Una travesía entre el mundo de los vivos y el de los muertos
La trama argumental nos trasladará al papel de Kena, una guía espiritual que se encuentra conviviendo en una aldea en ruinas dentro de un profundo y frondoso bosque. Kena tiene un papel muy importante en este universo ya que actúa como intermediaria entre la vida y la muerte, entre lo que es real y tangible y lo espiritual. Su trabajo, muy necesario en este mundo, es el llevar y acompañar a los muertos en una transición a las almas errantes entre ambos lugares.
Nuestra protagonista tiene una gran responsabilidad ya que viene de una larga tradición familiar que durante generaciones han actuado de guías espirituales. Pero, no es oro todo lo que reluce, ya que algo ha ocurrido en esta aldea y sus zonas más cercanas, haciendo que su vasta y bella localización se vea infestada de unas plantas que crean monstruos vegetales. Todo esto aparentemente no tiene ningún sentido y que debe ser desgranando a lo largo de este camino.
Uno de los puntos que más interesaban a la comunidad de jugadores era saber más sobre la protagonista, siendo un auténtico misterio tras cada tráiler y vídeo. Ember Lab ha sabido dar ese misterio que la rodea detrás de ella y todavía continúa siéndolo, ya que la historia gira más alrededor de la naturaleza y la transición entre los mundos de vivos y muertos que de la propia Kena. Algo que puede decepcionar a uno pero que al mismo tiempo ensalza ese misticismo y misterio.
Quizás uno de los puntos más interesantes es el explorar este universo e ir conociendo a aquellas almas atormentadas que han quedado encalladas en el mundo real, teniendo tras de sí historias impactantes. Cada una tiene sus propios motivos y es en este punto donde la desarrolladora ha puesto un esfuerzo especial para transmitir una gran emoción. Absorbe desde el primer minuto y cautiva hasta la aparición de los títulos de crédito.
Su mecánica de juego ha sido muy trabajada y nos trae muchos recuerdos, ya que tiene ese aire añejo de plataformas en tres dimensiones que tanto echábamos de menos y que embaucó a muchos a principio de siglo. Fases de plataformas, puzles con una dificultad que aumentará con el paso de las horas, armas, curva de mejora del personaje... conceptos que quizás se han ampliado en exceso y no hacen tan accesible su jugabilidad. Kena irá en todo momento armada con un bastón, un báculo repleto de fuerzas mágicas que usar como arma.
Algo clásico en este estilo de combate en tercera persona es la presencia de pocos, pero eficientes movimientos, teniendo uno más rápido y débil y por el contrario otro con menor rapidez, pero devastador. Esto, sumado a la combinación de ambos, da la posibilidad de crear ligeras cadenas de combo. El frenetismo de estos primeros momentos se aúna con movimientos para esquivar los ataques enemigos y posteriormente aumentando el arsenal de armas, como la presencia del arco que ya otorga otra manera de jugar e interactuar. El sistema de combate es eficiente y cumple con creces, y más cuando sentimos que Kena progresa a lo largo de la aventura sumando más habilidades y potenciando su arsenal.
Los Rot: unas adorables y útiles criaturas
Para salir algo más de la tónica de combate directo y golpes con el bastón a diestro y siniestro contamos con los Rot, unas pequeñas y encantadoras criaturas que habitan este mundo y que nos servirán de gran ayuda. Estas, según son descritas en el título, son de una gran timidez y encontrarlas no será tarea fácil, por lo que tocará explorar e investigar los escenarios a fondo para hacernos con el máximo posible. ¿Cuál es su uso? Principalmente obedecerán a todas las órdenes y comandos que les proporcione Kena, ayudándola a llegar a sitios en un principio inaccesibles o sacrificarse por el bien de la aventura. Si necesitas mover una estatua, mover un obstáculo o desplazar objetos de grandes dimensiones, siempre tendrás a tu disposición a los Rot para echarte una mano.
Estas criaturas también son de gran utilidad durante el combate, pero en un inicio huirán despavoridas ya que además de su timidez son muy asustadizos. Para ello habrá que ayudarlas a ganar un plus de valor durante los combates. A medida que se asesten golpes al enemigo, estas irán rellenando un medidor que simboliza su coraje y una vez activo, nos llevará a tenerlo nuevamente en nuestras manos y listos para recibir órdenes. Si deseas mandarlo al ataque para que aseste un golpe y tenga K.O a un enemigo durante unos segundos o combinarlo para usar una técnica especial, da por hecho que estos encantadores compañeros estarán dispuestos a contar contigo. Esto es muy de agradecer ya que, en cierta forma, la presencia de los Rot le añade un nivel más de profundidad al combate y no sentirte constantemente machacando botones y utilizar las mismas armas. Por lo que esto, unido a que te acompañarán en puzles y fases de plataformas, le da un plus más a sus mecánicas.
Además de los ya mencionados combates, tenemos una variedad de enemigos a los que hacer frente. Un punto que ha sido muy mencionado por parte de la comunidad ha sido el de la Inteligencia Artificial y los movimientos de los enemigos. Estos al inicio de la aventura no serán muy complicados de batir, pero poco a poco se convertirá en un pequeño desafío muy agradable para aquellos que busquen una aventura que no sea un camino de rosas. En momentos concretos, entre enemigo y enemigo, aparecerán pequeños jefes de zona que no pondrán las cosas sencillas y que incorporan mecánicas concretas en las que habrá que descubrir sus puntos débiles, son inmunes a las habilidades de Kena o simplemente se curarán a sí mismos y deberá pensarse de forma rápida.
Estas mecánicas son desafiantes y rompen con la rutina de Kena: Bridge of Spirits, proporcionando aproximadamente una docena de horas en este universo. Si combatir es lo tuyo, estás de enhorabuena ya que se tienen peleas especiales contra enemigos que se encuentran ocultos en unos misteriosos cofres y que a través de unas normas concretas obligarán a derrotar a una criatura y demostrar que eres el mejor en el ring.
Si eres un jugador completista, esta cantidad de horas se verá aumentada un poco más gracias a los diversos coleccionables que se localizan en los entornos. Uno de ellos son los Rot, ya que se dispone de hasta una centena disponibles que ayudan a mejorar a la propia Kena, por lo que para llevarla a su máximo nivel de poder tendrán que hallarse a todos. Otros elementos como sitios para meditar y elementos cosméticos para la protagonista aumentan incluso más la duración. Kena: Bridge of Spirits ha llegado, por el momento a la distribución digital, con textos de pantalla en castellano y voces en inglés.
Un espectáculo técnico
Uno de los elementos que tanto llamó la atención a los jugadores fue su apartado artístico y Ember Lab ha puesto el todo por el todo para proporcionar una experiencia de fábula e inmersiva. Sus entornos, estilo en los personajes y enemigos, además de efectos gráficos han logrado crear un compendio que da la sensación de estar jugando a una auténtica película de animación. Influencias como Pixar, Illumination y Studio Ghibli quedan patentes, proporcionando unos ángulos de cámara en sus secuencias más que espectaculares.
Los personajes han sido generados de una forma muy eficiente, sobre todo notándose en lo trabajado de sus animaciones y gestos faciales, expresando eficientemente sus emociones. Los entornos son de unas grandes dimensiones y fomentan mucho la exploración, además de casar puzles, combates y retos dentro de ellos, haciendo que no parezcan metidos con calzador, algo muy complicado en estos tiempos.
También han sabido dotar de una gran personalidad no sólo a la protagonista, si no a sus adorables acompañantes los Rot. La iluminiación es otro de los aspectos más trabajados, dando estampas realmente espectaculares, además de jugando un papel sobresaliente en los combates con los destellos que desprende el bastón de la protagonista. La banda sonora corre a cargo de Jason Gallty, conocido en las redes como Theophany. Ha sabido realizar instrumentaciones cargadas de misticismo y tranquilidad, trasladando de forma relajante y más que eficiente a esta gran aventura.
En definitiva…
Kena: Bridge of Spirits había depositado muchas ilusiones por parte de Ember Lab y generado una gran expectación en la comunidad de jugadores y realmente las ha conseguido copar. Una aventura que cualquier poseedor de PlayStation 5, PlayStation 4 o PC no debe dejar escapar bajo ningún concepto. Se han remotado mecánicas como las plataformas en tres dimensiones, un buen sistema de combate que gracias a los Rot se ve ampliado y sobre todo una trama y aspectos técnicos de película. Si eres un fanático de lo ya mencionado anteriormente, es una compra prácticamente obligada, estando ante uno de los mejores títulos independientes del año.