Nos resulta especialmente satisfactorio poder hablar de lanzamientos destacados cuando hablamos de un juego desarrollado en nuestro país. Si hace una semana os hablábamos de las bondades de Way Down, hoy toca hablar de un auténtico juegazo, que podría llegar a colarse entre las listas de mejores indies del año, y que ha sido desarrollado por un estudio ubicado en Talavera de la Reina. Aeterna Noctis ya apuntaba maneras, y ha cumplido sus expectativitas.
El juego de Aeternum Game Studios ha contado con la ayuda del programa de PlayStation Talents Alianzas, y ha llegado hoy a PS5 y PS4, pero también está disponible en Xbox Series y PC (y próximamente en Switch). Aeterna Noctis es un metroidvania 2D maravillosamente diseñado, que ofrece unas 30 horas de juego (que pueden llegar a las 60 si nos gusta entretenernos) y que cuenta con un apartado artístico exquisito, una banda sonora sublime y un gameplay exigente y desafiante (pero no imposible). El resultado final resulta redondo.
La historia de Aeterna Noctis está muy bien construida y, aunque pueda parecer que parte de uno de los más conocidos tópicos de la cultura popular, cuenta con mucha ‘miga’. El título nos cuenta, con una bella introducción de imágenes 2D, cómo dos seres inmortales, el Rey de la Oscuridad y la Reina de la Luz, luchan eternamente por dominar un mundo fantástico creado por un ser superior, Caos. Unas veces gana la batalla la luz y otras la oscuridad, pero la contienda siempre acaba igual: con uno de los dos derrotado, sin poderes de ningún tipo, pero resucitado ya que no puede morir.
Así, inmortal derrotado tiene que volver a recorrer un extenso camino, buscando recuperar todo su antiguo poder para volver a enfrentarse a su némesis y acabar con él, o volver a caer. Todo en un ciclo sin fin que permite que este peculiar y peligroso universo se mantenga en equilibrio.
Tras la introducción, asistimos a la caída del derrotado Rey de la Oscuridad, y en ese momento tomamos su control. Ahora somos poco menos que un paria, pero tendremos nuestros recursos. Por delante de nosotros, hasta 16 complejos e intrincados mundos en los que explorar, combatir y recuperar todos los recursos y poderes posibles para volver a ascender a nuestra posición.
La historia es profunda y apasionante y se nos narra con un fabuloso doblaje, que cuenta con la voz de la actriz de doblaje Nuria Mediavilla como narradora principal. Y el resto, nuestro propio personaje y sus conversaciones con cientos de personajes del juego que encontraremos, todos con un fabuloso doblaje al ‘aeterniano’, un lenguaje inventado y que suena francamente bien.
Las plataformas y los combates con toda clase de esbirros nos tendrán entretenidos horas y horas mientras nos adentramos en las tripas de este mundo plagado de misterios y recompensas ocultas por descubrir. El juego tiene un punto alto de dificultad. Bueno, digamos que es muy desafiante. Está diseñado para ser un reto para los jugadores y para enganchar a los más incondicionales del género. Pero, a la vez, cuenta con algunas ayudas en el diseño que lo hacen un poco más amable y menos desesperante, si lo comparamos con otros títulos similares.
Los movimientos de nuestro anti-héroe son en principio muy limitados, ya que hemos perdido todo nuestro poder. Un salto medio que hay que medir muy bien (manteniendo pulsado para alargar su impulso), una caída calculada para rebotar sobre enemigos y otros mecanismos y un golpe sencillo con su espada es lo poco que el Rey de la Oscuridad puede hacer tras su caída en desgracia. A medida que avancemos, y gracias a la apertura laboriosa de 10 grandes puertas, conseguiremos recuperar todos los movimientos y poderes que le son propios (comenzando con un útil dash lateral).
Con esto movimientos limitados, y con los que iremos añadiendo, las fases plataformeras de los diferentes niveles exigen una precisión milimétrica en los saltos y demás movimientos. Esto resultará desesperante para algunos jugadores, pero dulcemente desafiante para otros. Y lo bueno es que los movimientos están diseñados para que el jugador tenga control total sobre ellos. Por ejemplo, el dash puede interrumpirse en cualquier momento, permitiendo al jugador una sensación de control absoluto sobre el personaje. Lo que hace que la resolución de las fases de plataformas o los combates sea muy satisfactoria. Además, los diferentes monstruos y esbirros que encontraremos poblando todas las esquinas de este mundo nos irán exigiendo aprender sus rutinas para eliminarlos sin problemas.
Como hemos dicho, Aeterna Noctis es un juego desafiante (tirando a difícil) pero sus desarrolladores han decidido añadir algunos elementos que lo hacen más asequible, tal vez pensando en todo tipo de jugadores. Uno de ellos son los checkpoint que guardan nuestro progreso y que son muy numerosos. Esto nos asegura la reaparición muy pocos metros atrás de nuestra última muerte. Así, no hay que repetir una decena de instancias sino, tal vez, las dos o tres últimas que superamos.
Además, cuando un enemigo acaba con nuestra vida, el Rey de la Oscuridad pierde su botín hasta el momento (podemos recoger oro, magia y objetos a lo largo de la aventura) y ese botín se quedará en el lugar de nuestra muerte o asociado al enemigo que acabó con nuestra vida. Al reaparecer en el checkpoint cercano podemos volver a enfrentarnos a él para recuperar todo nuestro botín. Y lo mejor es que el botín no tiene un tiempo de caducidad, sino que permanecerá ahí hasta que consigamos volver y reclamarlo, aunque para ello hayamos muerto 14 veces.
Estos elementos hacen que la dificultad baje un poco y que las oportunidades para rejugar esa parte que se nos atasca, esa sucesión de plataformas imposibles o ese enemigo que no somos capaces de eliminar, sean más inmediatas. Eso, unido a la relativa sencillez para eliminar a los enemigos medios, hace que los jugadores más acostumbrados al género tal vez piensen que es un juego sencillo. Aunque no lo es, en general. Y es que hay muchas sorpresas, entre ellas los fascinantes y complejos enemigos finales. En todo caso, la dificultad es progresiva y bastante justa, dependiendo de las herramientas a disposición del jugador que se van adquiriendo.
Y es que el juego cuenta con un profundo sistema de progresión, que permite ir aumentando el contador de vida, pero también las habilidades del personaje en tres aspectos: combate, supervivencia y destrezas mágicas. Y otro de los aspectos más interesantes es que el mapa es abierto y permite al jugador elegir el camino a seguir. Las 16 grandes zonas están interconectadas y podemos decidir nuestro siguiente destino, o volver a visitar zonas ya exploradas para encontrar nuevos caminos o recompensas.
La historia principal avanza por un recorrido concreto en este mapa, pero los desarrolladores han diseñado todo para que los jugadores exploran a su manera, en el orden que quieran y buscando sus propias aventuras. Además, el sistema de misiones nos empuja a seguir un buen número de misiones secundarias realmente interesantes, además de las misiones principales de la historia. Las 30 horas que puede llevar completar la historia principal puede llegar fácilmente a las 60 si nos entretenemos en todo ese contenido secundario, cargado de sorpresas y útiles recompensas.
A nivel artístico el juego cuenta con un diseño 2D muy cuidado y original, con bellísimos escenarios, fondos y personajes dibujados a mano. Sus diseñadores han conseguido crear unos fabulosos y precisos movimientos con animación tradicional y en el juego todo funciona a la perfección. Y los detalles de cada uno de los mundos, combinados con la excepcional banda sonora, consiguen crear una ambientación única. Y la versión de PS5 del juego añade un buen número de efectos con el DualSense que se agradecen y te meten mucho más en el juego.
Ya parecería que Aeterna Noctis iba a ser uno de los juegos indies españoles que más iban a dar que hablar este año, y ha llegado casi al final de este 2021 para cumplir estas expectativas. Un metroidvania 2D excelentemente diseñado y cargado de detalles fabulosos. Un juego que homenajea al género, pareciéndose a algunas propuestas ya vistas, pero con sus propios argumentos y su propio sistema de dificultad progresivo y adictivo a partes iguales. Encima, envuelto en un fabuloso apartado técnico y artístico. Los chicos de Aeternum Game Studios nos han conquistado.