Las viejas leyendas nunca mueren y eso es un hito que también se ha logrado en los videojuegos. En una época en la que estamos acostumbrados a ver remasterizaciones, adaptaciones e incluso remakes de todo tipo es normal que veamos que algunas puedan ser totalmente merecidas y otras innecesarias. Hoy nos toca hablar de Red Dead Redemption, título que ha llegado por sorpresa a PlayStation 4 y Nintendo Switch, esta última plataforma en la que más nos centraremos por ser algo que ni mucho menos imaginábamos que veríamos. Rockstar Games ha puesto la carne en el asador con esta historia de vaqueros que llega con su DLC Undead Nightmare y una buena optimización. Nosotros hemos tenido ocasión de probar a conciencia la versión optimizada para Nintendo Switch.

El título llegó hace más de una década a PlayStation 3, Xbox 360 y PC ofreciendo una auténtica revolución tras lo visto en Grand Theft Auto. Este fue un aperitivo del que muchos esperaban, la quinta entrega del mundo abierto de Rockstar Games y que fue todo un acierto, tanto que ha llegado a infinidad de plataformas con múltiples versiones y causando unas críticas más que positivas por parte de la comunidad.

Red Dead Redemption nos traslada al año 1911 donde nos encontramos con un Salvaje Oeste muy diferente al que hemos visto en el cine. Sumergido totalmente en la Revolución Industrial nos pondremos en el papel de un ex-forajido llamado John Marston y que trae consigo un pasado turbulento que no deja de perseguirle. Tras lo sucedido y múltiples problemas con el gobierno de los Estados Unidos es el momento de que este recorra el ancho y largo Estados Unidos conociendo a personajes memorables y realizando multitud de misiones.

John Marston no se encontrará solo en esta aventura dado que irá acompañado en muchas misiones de compañeros que le servirán de apoyo y refuerzo en objetivos que conllevan realizar robos, fases de tiroteos, timbas y multitud de peleas mano a mano. Por otra parte, Rockstar Games ha incluido multitud de misiones secundarias que permiten explorar un mapeado que goza de unas dimensiones lo suficientemente grandes para ser entretenido explorar. Todos estos objetivos se encuentran dispersos por lo largo y ancho del salvaje oeste y como es habitual, la toma de decisiones será algo interesante y que realizaremos.

Grand Theft Auto incluye multitud de vehículos que conducir y en este caso John Marston vivirá sus aventuras a lomos de caballos e incluso mediante el robo de diligencias. Una de las curiosidades es que no se pueden realizar los viajes desde un punto a una misión concreta sin que caiga la noche por lo que se disponen de campamentos que instalar y que harán las veces de puntos de teletransporte. Viajar entre un punto y otro sobre el papel puede parecer aburrido, pero no lo es ya que durante estos trayectos encontraremos misiones en las que dar caza a animales como coyotes, eventos aleatorios como salvar a un determinado personaje que está siendo asaltado o simplemente salvar a una persona. Esto hace que el universo de Red Dead Redemption esté siempre en completo movimiento, lleno de vida y con objetivos que realizar.

Los minijuegos también son una tónica habitual dentro de las ciudades y sus tabernas. Las timbas de póker son algo totalmente habitual, algo que hará que se gane dinero con el que adquirir armas y todo tipo de objetos de personalización. A esto hay que sumar otro tipo de eventos como las patrullas nocturnas o cacerías que sumarán más experiencia al personaje. Si todo este contenido parece poco hay que sumar que viene acompañado de la expansión Undead Nightmare, uno de sus contenidos descargables más atractivos. En este caso se orientó más a lo visto en el género de terror de bajo presupuesto y donde los zombies y criaturas sobrenaturales cobran vida para poner las cosas más interesantes. A pesar de la llegada de este tenemos la ausencia del modo online.

En términos de control, el título ha sido muy bien implementado en Nintendo Switch, proporcionando una forma de dirigir al personaje acertada y precisa. En modo portátil puede hacerse algo tosco debido a la forma de los Joy-Con y su ergonomía, pero es algo que se soluciona con la consola en el televisor y el mando Pro. Este último da una experiencia mucho más cercana a la del resto de consolas.

En cuanto a su rendimiento en Nintendo Switch debemos decir que lo hace de una manera más que notable. Sorprendentemente tiene una gran optimización teniendo en cuenta las dimensiones del juego y la cantidad de detalles que tiene. Se mueve a una tasa constante de 30 FPS tanto en modo portátil como con la consola en el televisor. Este luce unos colores y unos modelados nítidos y bien diseñados pero que al mismo tiempo muestran errores como animaciones erráticas en ocasiones, pop-in y bugs típicos. Su banda sonora continúa siendo la misma que pudimos ver en versiones anteriores con orquestaciones acertadas y que trasladan de lleno al Salvaje Oeste. Mención especial también al magnífico doblaje al inglés y su traducción con subtítulos al castellano.

Red Dead Redemption ha llegado a Nintendo Switch con una sorprendente conversión que cumple de manera muy eficiente. Si bien es cierto que se trata de un juego de hace más de una década podemos decir que se ha hecho un gran trabajo en tareas de optimización de controles, imágenes y sonido. Es una aventura realmente entretenida y la posibilidad de llevarla en modo portátil es algo que nos ha fascinado. ¿Merece realmente su compra? Ahí entra el gusto de cada uno. Aquellos que lo disfrutaron en su momento o quieran descubrir las aventuras de John Marston están de enhorabuena dado que es una gran ocasión.