En nuestra ruta por Almería, nos citamos con el humorista Pepe Céspedes en San juan de los Terreros. Desde allí cogemos un barco para acercarnos hasta la isla de Terreros, de origen volcánico. Nos damos un baño y sufrimos la agresividad de una gaviota.
Ya nos decía Rubén, el experto, que las gaviotas se encontraban anidando y que esto las ponía muy nerviosas. Por eso, cuando nos metemos en el mar, sufrimos un amago de ataque por parte de una de las aves. Concretamente, se acerca demasiado a Pepe mientras se encuentra en el agua.
“Me habrá confundido con una ballena o un cachalote”, bromea Pepe Céspedes en un primer momento. Pero la gaviota vuelve en varias ocasiones, obligándonos a abandonar. Eso sí, el miedo ha sido rebajado gracias al humor de Pepe: “Nos vamos pitando”.