Si hay algo que caracteriza a Nueva Orleans es su tradición musical, ya que en esta ciudad nació el jazz y su hijo predilecto: Louis Armstrong. El equipo del programa ha paseado por las calles de Bywater, un barrio lleno de murales y arte callejero que fue uno de los más castigados por el huracán Katrina y que ahora resurge gracias al arte.
En Frenchmen Street encontramos auténticos locales de jazz, bares en los que comenzaron hace décadas a tocarse piezas callejeras que le dieron a Nueva Orleans la imagen que hoy día tiene, la de un lugar multicultural y con mucho, pero que mucho ritmo.
En esta zona puedes pasar todo un día disfrutando de música en directo: “Aquí hay ambiente desde las tres del mediodía hasta las tres de la mañana (…) La música aquí nace en la calle y es algo que forma parte de la cultura de la gente, desde que nacen hasta que mueren”.
Precisamente fue en esta zona donde se creó la batería: “El chico del bombo no llegó al ensayo y otro de ellos lo solucionó tocando con el pie, por eso los mejores baterías vienen de aquí”.