Risto Mejide: Ahora que hablas de historia, ¿cómo serás recordado?
Zapatero: ¿Tú qué piensas?
Risto Mejide: ¿Te lo digo sinceramente? ¿Con brutal honestidad?
Zapatero: Sí, sí.
Risto Mejide: Creo que eras un presidente que era muy deseado y cuando llegaste al poder, nos traicionaste. Nos traicionaste.
Zapatero: Ésa es una visión muy frecuente en las democracias.
Risto Mejide: No, es tu caso. Tú me has preguntado qué pensaba.
Zapatero: Esto es el talante.
Risto Mejide: Yo de eso no tengo. Tuve la sensación de que hubo dos Zapateros: el Zapatero de la primera legislatura que cumplió un programa que era improbable. Simplemente había puesto la carta a los reyes magos porque nadie pensaba que ibas a ganar. Luego hay el Zapatero de la segunda legislatura. Muchísimo más oscuro. Mucho más populista. Es el Zapatero que nos dijo "por el pleno empleo" cuando ya sabía que estábamos en crisis y que llevábamos dos años en crisis. Para mí, eso fue una tremenda traición. Es el Zapatero que encima comparece delante de todos los españoles y nos dice "voy a efectuar los mayores recortes en democracia que hemos tenido hasta la fecha". Y, luego encima, nos explicas que esto no es culpa tuya porque viene de Europa. Desde entonces, no podemos confiar en ningún presidente.
Zapatero: Siempre el juicio retrospectivo es difícil de hacer. Te invito a que pongas encima de la mesa qué gobierno ha sido el que ha incrementado más las pensiones mínimas de toda la democracia o el salario mínimo interprofesional con la crisis. O las becas o las ayudas a los más desvalidos que son los discapacitados. Resulta que el único gobierno que hizo una ley de la discapacidad y estableció prestaciones para casi 700.000 familias fue el gobierno que yo presidí. Respeto que se pueda decir eso pero siento que en mis políticas sociales cumplí con mi coherencia de ser un presidente socialdemócrata. Esto no es discutible.
Risto Mejide: Algo hiciste bien pero... ¿nos engañaste o no nos engañaste? ¿Sabías que había crisis y estuviste ocultando el término para volver a ganar las elecciones?
Zapatero: Esto no se puede ocultar y menos engañar. ¿Qué sentido puede tener que un responsable del gobierno pueda decir ahora voy a ocultar que hay una crisis? Es inimaginable. (En ese momento, el programa emite los vídeos de Zapatero evitando la palabra crisis y pronunciando la palabra desaceleración).
Risto Mejide: ¿No lo sabías?
Zapatero: Absolutamente, no.
Risto Mejide: Entonces es un tema de competencia porque la mayoría de los economistas lo sabía.
Zapatero: La inmensa mayoría de los mejores economistas reconocen que nadie vaticinó una crisis de esa envergadura. Es cierto que tardé en utilizar la palabra crisis, es verdad que me resistía a utilizarla. Fue un error porque la sensación ya era de crisis. Fue un error de apreciación. Claro. Un error por no trasladar la sensación de desconfianza. Eso sí, nunca he negado que soy optimista y cuando estaba al frente del gobierno era optimista. Buena parte de las cosas que me plantee, de las más cruciales, la pude llevar adelante. Por ejemplo, el final de ETA. No fue fácil retirar las tropas de Irak y la determinación política me permitió retirar las tropas de Irak con el enfado de Bush.
Risto Mejide: ¿Crees que eso nos benefició?
Zapatero: ¿Pero no era un compromiso electoral? ¿No se trataba de si había traicionado o no?
(Risto Mejide sonríe irónico).
Zapatero: Cumplir ese compromiso electoral sabía que iba a traer costes pero lo hice.