Es curioso que digas que Márquez es un tipo agresivo en la pista y luego se pone delante de los micrófonos y es un niño adorable.
Da esa impresión. Parece un chaval simpático enrollado y bastante natural, pero da esa impresione delante de las cámaras. Siempre está contento, a pesar del resultado, todo le parece bien y Valentino también da esa imagen. Hay deportistas o personas como yo que cuando estamos cabreados, no me sale sonreír y mostrar felicidad porque realmente estoy cabreado por la carrera que he hecho.
Igual es porque no sabes perder…
Es que a nadie le gusta perder. He aprendido a saber perder, pero he tenido que aprender porque no sabía perder.