Mucho coqueteo y un secreto inesperado en la cena de Sergio: ““Me llamaban 'La Whitney de Triana'”
Un menú pijo con toques andaluces en casa de Sergio
Sergio sabía que tenía el listón muy alto después de la cena de Marco y ha querido sorprender a sus invitados con un menú elegante que incluía sus platos preferidos. De primero ha preparado ‘El secreto del mar y la tierra’ (Una ensaladilla de gambones con un toquecito personal), en el principal ha querido volver a su infancia con un ‘Recuerdos de extremadura’ (Solomillo al ajo tostado) y el punto dulce lo ha dado con una ‘Pasión exótica’ de mango.
Planes de boda y un salmorejo derramado en el cóctel de Sergio
Sergio se ha puesto guapísimo para recibir a sus invitados y por qué no decirlo para llamar a las puertas del corazón de Marco. Sin embargo, quién le ha tocado el corazón de verdad ha sido Marco a él. El italiano se ha presentado con una preciosa orquídea blanca y el anfitrión ha sentido que ya estaban listos para pasar por el altar “parece que nos vamos a casar, me traes el ramo y todo”. Sergio estaba feliz, pero Deiver no estaba dispuesto a ponerle las cosas fáciles y el cóctel se ha convertido para Marta en una “pelea de gatas”, por no hablar del momento salmorejo al suelo que ha protagonizado el italiano.
Los secretos desvelados de Sergio
Aprovechando que había acabado de degustar la ensaladilla de gambones, Marco y Deiver han querido saber quién era el hombre que aparecía en todas las fotos de Sergio y se han quedado de piedra cuando han escuchado “Es el amor de mi vida”. Sergio les ha explicado que se trata de su mejor amigo y el hombre perfecto para él, pero que tenía el pero de que era homosexual. Además, el anfitrión les ha contado que es estilista y que en sus años mozos era Drag Queen y le llamaban “La Whitney de Triana”.
Una fiesta flamenca, lo mejor de la cena de Sergio Motera
Fiel a sus orígenes sevillanos y haciéndole un guiño a los gustos de Marco, Sergio Motera ha contado con la ayuda de unos amigos para ofrecerles a sus invitados una fiesta flamenca de esas de las que quitan el sentido. Un fin de fiesta que para sus invitados ha sido lo mejor de la velada.
