Inglaterra se presentaba ante Bélgica con mucha más urgencia que la selección de Roberto Martínez. Necesitaba la victoria para seguir aspirando a la Final Four de la UEFA Nations League, pero los belgas tenían la oportunidad de dar un golpe encima de la mesa y dejar claro que son los principales candidatos a estar entre los cuatro mejores. Y así lo hicieron, con los goles de Tielemans y Mertens en la primera mitad, encarrilaron el encuentro con rapidez.
Dos selecciones con un juego vertical, y con la intención de atacar sin especular no tardó demasiado en llegar el gol. Inglaterra falló al sacar el balón desde atrás y Romelu Lukaku aguantó en la frontal del área la llegada de Youri Tielemans. El belga no se lo pensó y con un disparo seco hizo el primer tanto del partido. Imposible para Pickford, que aunque se estiró vio cómo el balón se coló en su portería tras golpear en el poste.
Inglaterra se revolvió y estuvo muy cerca de empatar en la siguiente jugada. Harry Kane se impuso por alto en el punto de penalti, y su remate de cabeza, con Courtois batido pese a su estirada, lo sacó Lukaku de cabeza. El delantero del Inter evitó el empate a los pocos segundos, y dio tranquilidad a los de Roberto Martínez para asentarse con el marcador a favor.
El equipo de Southgate intentó llevar el control del partido ante la necesidad de ganar y Bélgica no perdona con espacios. En una falta en la frontal del área llegó el segundo. De Bruyne se situó al lado del balón, y cuando todo el mundo le miraba a él para que golpeara el balón, Mertens empezó la carrera para pegarle al balón, superar la barrera, y ponerla donde no pueden llegar los porteros. Pickford voló de un palo a otro, pero era imposible que sacara el lanzamiento.
Bélgica aprovechó las dos únicas ocasiones claras de gol para marcharse al descanso con dos tantos de ventaja, y que ponía a los ingleses contra las cuerdas. Tenían la misión imposible de intentar la remontada en la segunda parte si no querían verse matemáticamente fuera de la UEFA Nations League. No se podían rendir y se hicieron los dueños del encuentro.
Bélgica aceptó resguardarse atrás y esperar los envites de los ingleses, que evidenciaron una falta de gol que poco habitual en su juego. Southgate metió a Sancho en el encuentro para buscar una mayor verticalidad, pero Inglaterra estaba con sus últimos minutos de vida en la UEFA Nations League. La última jornada del grupo no servirá de nada para Inglaterra.
Y si lo hará para Bélgica, que se jugará la clasificación para la Final Four de la Liga de Naciones con Dinamarca, que venció a Islandia con un penalti en el descuento (2-1). A los de Roberto Martínez les sirve el empate para meterse entre los cuatro mejores, y serán los daneses los que tengan que ganar a domicilio si quieren dar la sorpresa.