Pablo Iglesias e Irene Montero han presentado una denuncia oficial por algunos comentarios en Twitter en los que se hacía alusión a sus hijos pequeños, por amenazas e "incitación al odio". Concretamente, se trata de un tuit de una usuaria llamada '@Belonavox' (que se vincula al partido de Santiago Abascal) y fechado el pasado 18 de agosto, cuando ésta pregunto abiertamente que a qué colegio iban a ir los hijos del Vicepresidente del Gobierno y la Ministra de Igualdad porque "iban a ser carne de colleja".
Esta denuncia ha sido presentada además, después de un fin de semana en el que "simpatizantes de la ultraderecha" han lanzado gritos a la residencia de los miembros de Podemos en la Comunidad de Madrid: gritos en los que le dedicaban a Iglesias improperios como éste: "Chúpamela".
En las declaraciones a los medios que ha hecho la Ministra de Igualdad en favor del impulso del teatro, ha respondido a las preguntas sobre los gritos y amenazas que han sufrido la pasada jornada. "No me gusta ser victimista y no voy a hablar de todo lo que esto trastoca las rutinas con nuestros tres hijos, pero lo que sí tengo que decir es que el odio no va a quedar impune y que esto no va a impedir que sigamos trabajando", ha dicho Montero.
Este episodio ha tenido lugar pocos días después de que la familia Iglesias-Montero tuviera que renunciar a sus vacaciones en Asturias y volver a Madrid tras la aparición de una pintada cerca de su casa alquilada, en la que se leía "Iglesias, rata" y de que varios habitantes del pueblo en el que se encontraban compartieran su ubicación.