El miedo de que comienza una guerra nuclear tras estallarse el conflicto en Ucrania y tras el riesgo de fuga en la central de Chernóbil ha hecho que se disparen las ventas de pastillas de yodo en las farmacias.
'Todo es mentira' ha conocido que ya se ha producido el desabastecimiento de un tipo de estas pastillas de yoduro. "La gente ha leído que el yoduro potásico protege la glándula tiroidea ante un ataque nuclear y se ha desatado otra vez la locura", ha explicado una farmacéutica.
Incluso les han llegado a decir si se podía echar Betadine al biberón del bebé, ha contado una farmacéutica. Pero "las dosis que tenemos en farmacia no tiene nada que ver con las pastillas que se utilizan en emergencia nuclear". Eso sí se necesita tener una receta para que se dispensen.