‘Todo es mentira’ conectaba con Agustín, un sanitario que ha interrumpió su tratamiento oncológico para poder vacunarse y ahora se ha quedado sin la segunda dosis de la vacuna. “Yo fui del grupo que se vacunó el 19 de enero, me correspondería la segunda dosis el 9 de febrero pero hoy ha llegado el supervisor para decirnos que el día 9 no va a ser, que no hay suministros”, explicaba con desesperación Agustín.
“Se te queda una cara de tonto…”, continuaba el enfermero visiblemente disgustado mientras admitía que “tengo muchas posibilidades de acabar en una UCI si me contagio de covid”. “Hemos estado ahí dejándonos la vida y ahora nos encontramos una falta de sensibilidad…”, decía.
“Los vestuarios ahora son verdaderas tumbas, la gente parece zombis, estamos hartos, hartos de trabajar sin ningún respaldo. Yo cuando me levanto por la mañana o por la noche para ir a trabajar, yo tengo miedo”, le contaba a Risto.