‘Todo es mentira’ ha hablado con Cristina, la dueña de la tienda que ha sido saqueado durante una protesta en Logroño que acabó radicalizándose. Cristales rotos, estanterías vacías, muebles y sistema informático destrozados y hasta un cubo de basura en su interior. Así se encontró esta mujer su local después de que los delincuentes decidieran llevarse de todo.
Cuenta que aún tiene el susto en el cuerpo y no duda en lanzar el siguiente y contundente mensaje: “el pequeño comercio estamos abandonados, solo nos quieren para que paguemos impuestos, para que le demos luz y vida a la ciudad y luego somos un cero a la izquierda. Estamos desprotegidos. Con lo que tenemos encima, que vengan cuatro graciosos es la guinda del pastel”.