Manuel Rico, sobre el protocolo de la vergüenza que impedía tratar a los ancianos con covid en hospitales: “Ayuso tenía tres alternativas y no usó ninguna”

  • El Defensor del Pueblo urge a las comunidades autónomas a aumentar las inspecciones en las residencias

  • El periodista Manuel Rico critica que el Estado, además de no prestar este servicio (el 89% de las residencias son privadas), no lo controla

  • El protocolo de la vergüenza que se aplicó en Madrid en la primera ola impedía trasladar a hospitales a ancianos con covid que tuvieran un alto grado de deterioro cognitivo o dependencia

El Defensor del Pueblo urge a las comunidades autónomas a aumentar las inspecciones en las residencias de ancianos para evitar nuevas catástrofes como la ocurrida en la primera ola. Manuel Rico, periodista de Infolibre y autor del libro ‘¡Vergüenza! El escándalo de las residencias’, ha analizado en ‘Todo es mentira’ lo ocurrido al principio de la pandemia y la dramática situación que se vivió, sobre todo, en Madrid.

En España hay 5.200 residencias de mayores y poco más de 200 inspectores. Aunque fuesen superhéroes y superheroínas no podrían investigar de manera adecuada lo que ocurre en las residencias”, ha explicado el periodista. Además, dice que el 89 por ciento son de gestión privada. “Ya que el estado no presta el servicio, lo mínimo que tendría que hacer es controlarlo y no lo hace”, dice.

El protocolo de la vergüenza

Durante la primera ola, en Madrid se recurrió al llamado “protocolo de la vergüenza”. Rico explica qué es: “Establecía que se prohibía trasladar a los hospitales a los mayores que cayesen enfermos y que tuviesen un nivel de dependencia o de deterioro cognitivo alto”. A pesar de eso, el periodista critica que Ayuso no utilizó las alternativas que había para atender a estas personas: medicalizar residencias, trasladar a los mayores al hospital de campaña de Ifema o llevarles a hospitales privados.