Ricardo Reyes ha sido el encargado de leer en directo parte del comunicado de 39 jugadoras de la selección española de fútbol, 21 de ellas campeonas del mundo, en el que mantienen su postura de no volver a la selección si no se producen cambios estructurales en la RFEF:
"Los hechos que desgraciadamente todo el mundo ha podido ver no son algo puntual y van más allá de lo deportivo. Ante estos actos debemos tener tolerancia cero, por nuestra compañera, por nosotras y por todas las mujeres. Tras varias semanas después de lo ocurrido, se quiere poner en conocimiento público la realización de diversas reuniones con la RFEF en las que se ha expresado de manera clara y contundente por parte de la plantilla los cambios que entendemos que son básicos para poder avanzar y llegar a una estructura que no tolere ni forme parte de hechos tan denigrantes".
Con este comunicado, las 39 jugadoras firmantes piden que se produzca una reestructuración total del organigrama de la Federación, concretamente reestructurar la organización del futbol femenino, reestructurar el gabinete de la presidencia y Secretaria General, la dimisión del presidente de la RFEF, la reestructuración del área de comunicación y marketing, y la reestructuración de la dirección de integridad.
A las 16.00 horas de este viernes estaba prevista la presentación de Montse Tomé como seleccionadora absoluta, además de la convocatoria para los primeros partidos de la Nations League, algo que necesariamente se ha visto retrasado por el lanzamiento del comunicado.
Ricardo Reyes ha explicado que, de ser convocadas por Montse Tomé, las jugadoras que han decidido dar la espalda a la Selección podrían enfrentarse a multas económicas que van desde los 3.000 hasta los 30.000 euros y la posibilidad de que se les retirase la ficha federativa: "Durante un periodo de tiempo determinado no podrían jugar al fútbol".