Según 'El Mundo', los supermercados podrían quedarse sin pollos a partir de octubre. La situación de los granjeros es crítica y se enfrentan cada vez a pérdidas mayores debido al aumento del coste de producción.
Según ha explicado Román Santalla, secretario ganadería UPA, "nos vamos a quedar sin pollo porque no se puede seguir produciendo permanentemente a pérdidas". El precio para los consumidores españoles ha pasado de 2,25 euros el kilo a 3,25 euros, "se lo reparten dos eslabones de la cadena que son la patronal avícola y la gran distribución", ha explicado, y "los granjeros a día de hoy han recibido cero", ha añadido.
Por lo tanto siguen cobrando lo que cobraban hace años, "o incluso un poco menos", ha explicado, "lo que equivale a 15 céntimos por kilo de pollo criado y con esto no se puede vivir", ha sentenciado Román Santalla. "Lo que no puede ser es que el pollo forme parte de la inflación", ha afirmado, y que quien está produciendo esta carne siga cobrando como lo hacía hace 20 años.