Por primera vez en la historia de España, el Congreso de los Diputados dio voz a un terrorista yihadista, el único superviviente de una célula que perpetró un grave atentado en Barcelona en el año 2017, que dejó 16 muertos y decenas de heridos.

Durante su comparecencia, se mostró como una víctima de todo y, además, señaló al Centro Nacional de Inteligencia como el responsable ya que dice que sabían que el imán de Ripoll les iban a 'lavar' el cerebro.

Hay que recordar que esta declaración se ha producido por una solicitud de Junts mediante una cesión del Gobierno porque formaba parte de los acuerdos de la investidura. Ante este acto, los partidos de la oposición se revolucionaron por este hecho, tanto es así, que miembros del PP abandonaron la sala.

Esposado, con la cabeza agachada y con grandes medidas de seguridad, Mohamed Houli, condenado a 43 años de cárcel por los atentados de Barcelona y Cambrils llegó al Congreso. En ningún momento, fue capaz de mostrar ninguna prueba, solicitadas previamente por Bildu, pero si señalaba al CNI como responsable asegurando que "tenían conocimiento de las intenciones que tenía el imán".

Nacho Abad, tras ver las imágenes del yihadista en sede judicial planteaba a los colaboradores si es lícito que un terrorista declare en el Congreso. "Me parece una auténtica vergüenza para este país que un delincuente vaya a la casa de la palabra", afirmaba Paloma Cervilla.

Además, la periodista apuntaba, que lo que más le preocupa es el origen que ha provocado que esto pueda ocurrir: "Es un pago de Pedro Sánchez a que Francina Armengol sea presidenta del Congreso para amañar todas las sesiones parlamentarias durante esta legislatura".

Para finalizar, Cervilla volvía a mostrar su enorme indignación por esto que ha ocurrido y señalaba, que esto es una humillación para el Estado, para el CNI y para este país.