Aurelio, de 61 años, acudía a 'First Dates', como se dice, de 'punta en blanco'. Este pescadero jubilado viene de Cantabria y está en un momento de su vida bastante disfrutón. En el amor no ha tenido mucha suerte que digamos. Lleva un tiempo solo y es por eso por lo está en el programa de Cuatro: quiere encontrar a su media naranja. Es una persona con muchos hobbies. De hecho, no cree que haya alguien que tenga más que él.
Y tiene una pasión por encima de todo: la música. Toca la armónica, algo que no ha dudado en demostrarle a Carlos Sobera. Además, hay algo muy curioso y es que ha aprendido a tocar la armónica por él mismo. Tras lanzarse a tocarla, el presentador de Cuatro le pedía que se reservase para su cita y así que pudiera sorprenderla. La soltera (María, de 63 años) aparecía en el restaurante y asistía perpleja al gran espectáculo de Aurelio con la armónica. Esta se reía y se quedaba impresionada.
Una vez los dos sentados en la mesa, brindaban y se abrían como nunca. Ya hay algo en lo que coincidían: ambos vienen de Torrelavega. Han hablado de sus respectivos trabajos, de la edad, de sus aficiones y de mucho más. María le preguntaba a Aurelio qué buscaba y este se sinceraba: "Personas como tú. Personas normales".
Ya en el postre, María continuaba con su batería de preguntas: "¿Eres celoso?". Aurelio tenía clara su respuesta: "No. Me da igual. Las personas que son celosas es porque tienen un problema". Una respuesta tajante y sincera. Posteriormente, era Aurelio quien preguntaba a su cita: "¿Cómo te gustaría a ti que fuera yo?".
María confesaba que le gustaría que fuera cariñoso y en resumidas cuentas, "alguien normal". Al término de la cita, hemos vivido un momentazo cuando la soltera se daba cuenta de que Aurelio miraba a la camarera: "Oye. Que no mires a la rubia. Estás conmigo". "No no, no la he mirado. Ha sido ella que me ha mirado así como diciendo... y yo la he saludado", subrayaba Aurelio.
En la decisión final, Aurelio los tenía claro: le gustaría tener una segunda cita con María. Y es que al soltero le ha encantado lo "divertida y sencilla" que era María, además de" todas las cosas afines" que tiene con él. Llegaba el turno de la soltera, que bromeaba con unos instantes de tensión dejando en el aire si quería o no... pero también iba a querer una segunda cita con el soltero.