Cuando la mayoría de los españoles se van a dormir, el 12% de ellos se levantan para iniciar su jornada de trabajo. Ese es el caso de Eloy y Julián, dos hombres que trabajan en una funeraria de Zamora y que han mostrado ante las cámaras de ‘Callejeros’ cómo son sus noches laborales.
Gracias a ellos, hemos podido ver cómo es el proceso de incineración de un cadáver. El encargado de realizar esta labor nos explica que el tiempo de cremación varía dependiendo del peso del difunto y de su edad, aunque suele durar unas “dos horas y media a 1000 grados de temperatura”.
Julián, que es la persona que se encarga de incinerar los cuerpos que llegan en la madrugada a este crematorio, nos cuenta paso a paso cómo es el proceso y de qué manera recogen los restos de metales del ataúd o las prótesis metálicas que tuvieran los fallecidos en sus cuerpos.
Para él, dice, es un trabajo normal y corriente y está más que acostumbrado: “La muerte es igual que la vida”, declara. Pese a que sus noches en este trabajo se desarrollan con normalidad, afirma que alguna vez se ha llevado algún susto: “Un día fui con Eloy a vestir a una persona y, al incorporarla, se movió un brazo y me dio un susto de muerte”, apuntaba.
Ante los micrófonos y cámaras de nuestro programa, Julián nos ha enseñado cómo es el proceso completo desde que llega el difunto a las instalaciones, hasta que las cenizas se introducen en una urna para las familias.