Sandra se convertía en concursante de ‘Lo sabe, no lo sabe’ y, tras una muy buena, primera parte de concurso conseguía asegurar 1.000 euros.
Pero la concursante decía jugárselo todo a la pregunta multiplicadora. Tras seleccionar el sobre, Sandra jugaba por 11.000 euros a una pregunta que, el elegido, debía acertar.
La persona elegida para responder la pregunta, pese a asegurar que no la sabía, en un primer momento dijo la respuesta correcta, pero decidió rectificar y dejar la respuesta con un ‘no lo sabe’.
Finalmente, Sandra perdía todo el dinero para decepción de todos, incluido, la persona elegida para contestar que era un conocido.