Ramón, un empresario valenciano jubilado, es el siguiente en irrumpir con fuerza en el restaurante del amor de ‘First Dates’ con el objetivo de dar con la persona con la que pasar el resto de sus días y descubrir en ella que uno puede volver a enamorarse, independientemente la edad que se tenga. Es un hombre al que le encantan todo tipo de mujeres, exceptuando las “malas”, que no las quiere ni ver ni en pintura.
La vida laboral de Ramón es muy extensa. El soltero asegura haber trabajado de todo durante toda su vida: “Empecé a los 19 o 20 años. Mi padre me autorizó a que yo pudiera tener una pequeña tabernita y empecé a hacer cosas. He tenido coctelerías, hamburgueserías, restaurantes, parques acuáticos”.
Sin embargo, parece que en el amor ha sido el propio Ramón el que ha traicionado a la mujer de sus dos hijos: “He sido infiel a mi exmujer porque me pillo con otro amigo en un festival del Mediterráneo. Se llevaba lo que se llamaba ‘Los Rodríguez’. Las mujeres iban al campo o la playa con los hijos y los padres hacíamos nuestras fiestas”.
Aunque Ramón haya engañado a su mujer con otra, no ha perdido aún la esperanza de dar con esa persona que le vuelva a conseguir cautivar el corazón. Por ello, ha acudido al restaurante del amor para dar con una mujer que sea muy activa y se complemente con él.
Laura Boado, en cuanto escucha todo lo que necesita Ramón para caer rendido ante la otra persona, se dirige al recibidor del restaurante para dar la bienvenida a Maribel, una empresaria jubilada de Santander que se considera muy “coqueta” porque le encanta verse bien.
En cuanto se ven por primera vez, Ramón parece quedarse prendado de la mujer con la que le han emparejado: “Me ha parecido una preciosidad porque es muy guapa”. En cambio, parece que Maribel no piensa lo mismo que su cita: “Me parecido un chico poco guapo. Vamos, más bien feo”.
Laura Boado les interrumpe momentáneamente para dirigirles hacia su mesa, en donde podrán disfrutar del tiempo perfecto para conocerse aún más y, quien sabe, encontrar el amor.
Una vez se encuentran sentados, empiezan a descubrirse más entre ellos con el objetivo de ver si llegan a coincidir en algún aspecto y encontrar la chispa. Aunque parece que la llama del amor no va a brillar mucho, en particular en Maribel, quien no ha sentido ninguna atracción por parte de Ramón
“Tengo un amigo que tiene 74 años y ha dejado a una embarazada. Yo le digo: Tomás, eres un fenómeno”, cuenta el soltero a su cita. En cuanto Maribel escucha esta revelación que le hace Ramón, la soltera se escandaliza: “A mí me parece un escándalo. Es una cosa fuera de lo normal. Nunca he oído una cosa así”.
En cuanto se sientan para conocer si tuvieran una segunda cita entre ellos, Ramón sí que querría mantener una segunda cita. Sin embargo, Maribel, que no ha sentido ese chispazo necesario para querer conocerse más, no querría tener una cita con él como pareja. Además, la soltera asegura que no le ha atraído tampoco en el apartado físico: “No es mi tipo”.