Dani Martínez, en una noche con Chenoa, Carlos Areces y Juana Acosta como invitados en 'Martínez y Hermanos' ha tenido que adivinar, mientras ellos respondían a las preguntas si habían contestado con un 'sí' o con un 'no', como en el resto de programas, lo que ha terminado con un divertido momento en plató.
"Estoy muy bien en esta temporada, me ponen los colores y tengo que adivinar cuál es verde y rojo, pero yo me lanzo a saber qué va a pasar antes, que no es mi cometido", entonaba el presentador con la pregunta para nuestros invitados de si han vivido algún momento incómodo con una celebrity, a lo que Carlos Areces decía algo: "Yo digo que son tres verdes". Y Dani Martínez bromeaba: "Tampoco sois gente que se haya codeado con mucha celebrity".
Al salir dos respuestas positivas y una negativa, Carlos Areces se dirigía a Juana Acosta: "No mientas, algún problema has tenido con alguna celebrity". Pero Dani no creía esto: "Estás jugando a la psicología inversa de que Juana está mintiendo y yo no he dicho que sea ella, Juana tiene una carrera internacional, un poco más que la tuya, por lo tanto tiene más capacidad de haberse juntado con alguna celebrity en algún momento".
Momento que aprovechaba el actor para lanzarle un divertido zasca a nuestro presentador: "A ver, tú tampoco eres Jimmy Fallon". Lo que desataba la risa del propio Dani Martínez y en especial de Chenoa, la que no podía aguantarse las carcajadas.
Este no era el único momento que Carlos Areces nos hacía reír en el programa y, es que, el actor relataba el momento 'tierra,trágame' que vivió hace años: "Tengo alguno, si tuviera que quedarme solo con uno quizá sería con el día que me cagué encima en el colegio".
El que nos contaba cómo vivió esta situación: "Fue con una edad en el que se te presupone ya un cierto control del esfínter. Estaba sentado en el pupitre, fue en clase, quedaban dos horas de colegio y decide quedarme sentado sin moverme un milímetro y luego salí corriendo".
Y cómo terminó la historia: "Sonó la campana, me fui, me recogió mi padre con tan mala suerte de que nos encontramos a mi tía y decidieron tener una charla. Yo estaba inquieto y dice mi tía: 'vámonos de aquí que huele un poco a mierda', sin saber que tenía al enemigo en casa".