'Volando Voy' se ha trasladado hasta la tierra de Jesús Calleja, Castilla y León, más en concreto hasta la 'Sierra de Gredos', en Ávila para descubrir pueblos con mucha historia, siendo por primera vez en nuestro programa la música protagonista: "Vamos a ayudar a una banda que empezó hace más de 140 años".

Jesús Calleja aterrizaba su helicóptero en 'Arenas de San Pedro', lugar hasta el que llegaba para conocer a la banda municipal y darles una sorpresa: "Tienen un director de orquesta tan singular que ha hecho que esta banda crezca tanto que ya no tienen un lugar donde puedan ensayar y nosotros les vamos a ayudar".

Nuestro presentador se acercaba a conocer a todos los miembros de la banda, compuesta por más de cincuenta músicos, mientras estaban en un ensayo y les comunicaba la gran noticia: "Que sepaís que vais a tener una nueva sala de verdad para ensayar, si hay algo que necesitáis es eso, no se puede hacer ni televisión en esta sala. Ya tiene que ser relevante la banda en este pueblo para tocar en estas condiciones".

"Nos das la vida para poder crecer", reaccionaba Alberto Barranco, el director de la banda, que nos explicaba que son mucho más que una banda: "Es el amor a la música y lo bien que lo pasamos después de tocar". Y, es que, se definen como "un grupo de amigos".

El equipo de 'Volando Voy' se daba cuenta en primera persona lo complicado que es ensayar tantas personas en este lugar y, es que, se hacía complicada la grabación de esta parte del programa.

"Me gustaría que probaras a dirigir tú y vieras si los directores hacemos algo o no", le decía Alberto Barranco. Momento en el que Jesús Calleja, que recibía el curso rápido del director, terminaba dirigiendo la banda como si del director se tratase, viviendo un momentazo en 'Volando Voy': "¿Pero qué es esto? Si esto sonaba de maravilla y lo estoy haciendo como tú".

Jesús Calleja también se trasladaba hasta la casa de Daniel, que tiene una impresionante colección, con más de 2.000 objetos de la historia del pueblo. "Sobre todo es indumentaria tradicional", nos explicaba él, de lo que nos daba más detalles y nos motraba: "Todo lo que sea tradicional lo guardo yo, tengo hasta las bragas de mi bisabuela. Dentro de todo lo que hay el traje más antiguo que tengo es de capitán de carnaval, que seguramente es de finales del siglo XVIII".

"¿Me lo puedo probar?", preguntaba Jesús Calleja y Daniel no dudaba en esto, aunque prefería que se probase el traje con el que se casó su abuelo: "No me digas que no estás guapo". Pero Calleja se veía como si fuera a dar las Campanadas: "Cuando oigais el 'clin, clin' no os las comais, son los cuartos".