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First dates

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El columpio sexual y el sillón tántrico, las dos tareas pendientes de una soltera de ‘First Dates’

Myriam se considera una persona creativa y polifacética. Es azafata y modelo, y en el amor está atravesando una etapa tranquila. Le gustaría que su cita de ‘First Dates’ se han un hombre tranquilo, receptivo y proveer “que invierta en mí”.

Dani, su cita, no puede estar con una persona si no siente que su cita le puede sorprender cada día. Al ver a Myriam ha visto a una chica muy atractiva “me ha gustado el color de su pelo”. Ella le ha dicho que era de Sevilla y el soltero le ha contado que él estaba viajando por todo el mundo trabajando en diferentes puestos, pero “me gustaría tener una razón para quedarme en España”. A Myriam le ha gustado mucho que su cita fuera un chico atento y tuviera detalles como retirarle la silla.

A Myriam le encanta que su cita le retire la silla: “Son detalles que ya no se ven”

Mientras elegían la cena, Dani le ha dicho que soñaba con ir a Japón y que el tataki tenía buena pinta. Myriam le ha dicho que ella también tenía ganas de conocer el país y le ha contado que había estudiado danza, y le apasionaban los musicales. Dani estaba encantado con ella y ha querido saber por qué no probaba la experiencia de trabajar fuera. Myriam le ha dicho que la curiosidad la tenía y que no tenía nada en Sevilla que la atara para no hacerlo.

Dani ha jugado a que Myriam adivinara su edad y no le ha salido nada bien. Ella ha sentido que tenía treinta y muchos, y al ver sus caras ha tenido que ir bajando la edad “he dicho 28 por su cara, pero me aparenta diez años más”. Al soltero no le gusta el horóscopo porque siente que es algo muy generalizado. Él es cáncer y siente que es una persona muy generosa, entregada, romántico… “soy un poco a la antigua”. La soltera se ha asustado un poco de que fuera todo tan bueno, pero también ha pensado que igual podía tener algo de verdad.

A Dani le gusta experimentar en el terreno sexual: “¿Conoces el sillón tántrico?”

Hablando de sexo, Dani ha querido saber si su cita conocía el sillón tántrico, algo que le gustaba mucho porque daba lugar a muchas posturas distintas y ella le ha dicho que no lo había probado, pero que lo tenía anotado en tareas pendientes junto al columpio sexual.

En el momento de la decisión final, Dani le ha dicho que quitando que le hubiera echado 36 años, había estado muy bien con ella y que sí le gustaría que siguiera conociéndose un poquito mejor. Myriam le ha dicho que le encantaba su estilo de vida, su forma de ver la pareja y que también quería tener una segunda cita.