Es la primera vez que habla para un canal de televisión y se considera un cabeza de turco. 'Código 10' ha hablado en exclusiva con el hombre que estuvo 18 días en prisión acusado de cometer los crímenes del 'asesino de la baraja' pero que fue puesto en libertad al no encontrar pruebas.

El primer crimen del asesino de la baraja fue un 24 de enero, cuando salió y, en plena calle Alonso Cano, disparó al portero de una finca en presencia de su hijo, de tan solo dos años.

En su segundo crimen se repitió el modus operandi, esta vez ocurrió en Alameda de Osuna de madrugada. Un chico esperaba en una marquesina de autobús, le pidió que se arrodillara y le disparó a bocajarro. En esta ocasión dejó una carta, un as de copas, lo que le valió el nombre del ‘asesino de la baraja’.

Poco después, entró en un bar donde disparó a bocajarro a una mujer que hablaba por teléfono, ejecutó al chico que estaba en la barra y lo intentó con su madre, disparándole en varias ocasiones, pero se salvó haciéndose la muerta. En este caso, no dejó cartas y nadie pensó que fue el asesino de la baraja.

La mujer que sobrevivió pudo decir cómo era el atacante y, en consecuencia, se produjo una detención de un joven que finalmente fue puesto en libertad. 'Código 10' le ha entrevistado en exclusiva y nos cuenta que le detuvieron en la puerta de su casa: "Me acusan del asesinato, de un homicidio que había sucedido aquí en Alcalá de Henares en el Bar Rojas".

"Yo no le encontraba explicación, pensaba que se habían equivocado, que era una confusión, que se iba a aclarar todo rápidamente y que iba a salir ese mismo día en libertad", explicaba el detenido, que quería proteger su identidad.

Se considera un cabeza de turco y es que cuenta que su madre preguntó a un agente por qué le hacían eso y esta fue su respuesta: "Dice viene de arriba, no podemos hacer nada'. Es el primer indicio, que yo sé que viene de algo del gobierno y el ministerio del Interior, con el tiempo se me confirma".

Según su abogado David Vázquez, en los registros no se encontró nada. Pero ¿Por qué figuraba entre los sospechosos? Al parecer, lo está porque su perfil estuvo involucrado en algún tipo de reyertas, tenía un pasado relacionado con algunos ataques xenófobos y había pertenecido a algún grupo de ideología de extrema derecha. Sin embargo, él nos cuenta que su vida era la de un chico normal.

"A mí, cuando se me detiene, ni me hacen una pregunta", se quejaba el entrevistado y contaba que estuvo en prisión 18 días por unos crímenes que no cometió: "Intenté estar lo máximo posible tranquilo, las circunstancias no eran agradables porque tu cara está en todos los telediarios y entras en prisión siendo un supuesto asesino de inmigrantes, que era lo que decían".

Finalmente, lo dejaron libre porque no había pruebas en su contra. Sin embargo, asegura que sigue siendo un lastre para él en su día a día: "A nivel social, a día de hoy lo sigo arrastrando cuando se me recuera el caso".