Paz Padilla y Anna Ferrer han viajado hasta Ecuador para conectar con la más pura naturaleza. Madre e hija, además de conocer la cultura del país, se han adentrado en la selva amazónica y han compartido momentos muy especiales con tribus que les han hecho reflexionar sobre sus vidas.
En la primera comunidad, las protagonistas de 'Te falta un viaje' conocían a Augusto Calazacón, un líder muy respetado entre los tsáchilas de todo el país, y a su poblado. Con él descubrían el saber ancestral enseñado de padres a hijos de la medicina tradicional basado en la vegetación del lugar. También lo que era "la cosmovisión".
Paz y Anna se veían maravilladas con el entorno. Después, mantuvieron una interesante conversación con las mujeres del poblado sobre su papel en la tribu mientras la presentadora de televisión y la influencer eran maquilladas y vestidas como auténticas tsáchilas.
Los días siguientes Paz Padilla y Anna Ferrer los pasaron con otra comunidad de Santo Domingo, los sarayaku, en la que valoraron aún más la naturaleza y la conexión espiritual con ella. Eso sí, pasaron bastante fatiga cuando las lugareñas prepararon larvas vivas para el banquete de la cena.
Para los sarayaku, la selva está habitada por espíritus y se conectan con ellos a través de los sueños. En ese sentido, madre e hija también descubrieron qué significado tenían los sueños que habían tenido. Mientras a Anna le terminó por preocupar el que había tenido con su novio, a Paz le aseguraron que soñar con los seres queridos que había perdido era una forma de que ellos se comunicasen con ella.
El viaje de Paz y Anna fue de lo más revelador para ambas. Más en el caso de la presentadora, que terminó reflexionando mucho sobre su estilo de vida. "Yo me estoy dando cuenta que a medida que estoy viajando voy conectando más con otras civilizaciones que con la mía. Yo sobro en España. ¿Cómo puede ser que los entienda tan bien?", explicaba a su hija. Paz Padilla incluso acabó asegurándole que se estaba planteando vivir fuera durante algunos meses y huir así de la falta de conexión con la madre Tierra.