Casi dos décadas después del incendio del Edificio Windsor, ahora Jon Imanol Sapieha, alias El Sapo, uno de los mayores delincuentes de la historia de este país, confiesa que él fue el responsable del suceso. Y comienza su relato revelando cómo recibió el encargo que le llevó a quemar uno de los edificios más emblemáticos del país, situado en pleno corazón financiero de Madrid.
Tras recibir una llamada en la que se solicitaban sus servicios, Jon tuvo un encuentro a caballo, ya que, en palabras de El Sapo, “dos personas que se encuentran a caballo no llaman la sospecha de nadie y no son escuchables”.
En ese encuentro, El Sapo confiesa haber recibido el encargo de buscar y destruir unos documentos que se encontraban en una de las plantas del Edificio Windsor. Pero no sería suficiente con eso, sino que también debería “purificar el terreno” y deshacerse de toda prueba de que alguien estuvo allí.
Sin embargo, este es solo el comienzo de un proceso que culminó con una de las mayores incógnitas de la historia reciente: el incendio del Edificio Windsor. Un suceso que, durante 18 años, no contaba con culpables. Hasta ahora.
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