Zola decía que la belleza es una actitud, es decir, que es una cuestión de confianza, de seguridad en uno mismo, de conducta y no tanto de unas cualidades físicas en concreto. Pues bien, esto es lo que Samanta ha querido poner a prueba en un programa en el que ha visto con sus propios ojos que no existe sólo un tipo de belleza y que sentirse bien con uno mismo es lo más importante para estar guapo.
¡Samanta supera todos sus complejos y desfila en bikini por una pasarela!
Le daba muchísima vergüenza y, como ella misma ha dicho, se sentía “insegura” y “el patito feo” del desfile pero, qué carajo. Samanta ha creído que lo mejor que podía hacer es poner a la vista de todos cuerpos reales como el suyo, llenarse de confianza en sí misma y desfilar en bikini como había prometido. Lo ha hecho, ha dado ejemplo y encima se lo ha pasado GENIAL.