Los solteros y sus pretendientas, rumbo a casa en '¿Quién quiere casarse con mi hijo?
cuatro.com
27/01/201516:23 h.Cinco destinos y una parada inesperada
Vigo será el destino que Markus tiene preparado a sus pretendientas, su ciudad natal. Irán en autobús y aunque ellas creen que la capital de Pontevedra será su última parada, María José les tiene preparada una sorpresa. Antes de llegar a casa tendrán que pasar una noche en un albergue rural de Galicia y al día siguiente tendrán que alcanzar Vigo por la misma ruta que el Camino de Santiago. Y el Camino de Santiago, con 15 centímetros de tacón, no resulta tan sencillo ni gratificante como con botas de montaña. Eso sí, el viaje deparará el primer beso de Markus en el programa.
Rafa no está dispuesto a viajar sin comodidades y decide llevar a sus candidatas a Marbella en su avión privado. Sin embargo, no todas las chicas caben en su jet. La única solución es dejar a una de ellas en tierra y Rafa tiene que tomar una decisión. Deberá expulsar a una chica y no hay tiempo que perder.
Un retiro espiritual en la Sierra madrileña es lo que les aguarda a las candidatas de David antes de que conozcan su casa. María Rosa quiere conocer el lado más emocional de las chicas y ése es el sitio perfecto para conseguirlo. Un gurú espiritual les enseñará curiosos ejercicios de meditación completamente alejados de la idea que tenían ellas de este tipo de prácticas. Una buena forma para que se desinhiban y se muestren tal y como son.
Sandro y sus candidatos tienen por delante un viaje a su Sevilla natal, con parada en el restaurante Casa Pepe, un establecimiento en cuya decoración destacan los símbolos dedicados a enaltecer la figura de Francisco Franco… un perfecto desconocido para según qué pretendientes. Durante el viaje, Sandro recibirá una dulce sorpresa y también verá algún que otro gesto que lo deja desconcertado.
Finalmente, Diego se llevará a sus chicas a Cáceres. Un agitado viaje en autobús en el que se produce un claro desencuentro entre ellas y una sonada bronca. El tranquilo ambiente de una encantadora casa rural intentará calmar los ánimos pero no será sencillo hacer callar a alguna de las candidatas más contestatarias.