Laura se queda sin cumplir su gran sueño: conocer Marina d'Or

Con la capucha puesta y su perrita en los brazos, Jesús se ha enfrentado a su decisión más complicada en ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’. El soltero ha reunido a sus chicas para comunicarles que se iban de viaje a Marina d'Or, pero que solo dos de ellas podían acompañarle. Jesús siente algo muy especial por las tres, pero no ha tenido más remedio que dejar fuera de la carrera por su corazón a Laura, quién se ha tomado muy bien la expulsión porque está convencida de que sus rivales solo piensan en comer y que el soltero se va a convertir en un “fofifuerte”.

Pepe no quiere más dramas en su vida, solo risas y alegría

La Albulfera valenciana ha sido el lugar elegido por Pepe para decir adiós a Motera. El soltero está convencido de que Sergio Motera es un chico estupendo, pero para él es “soso y aburrido”. Motera se ha ido con mal sabor de boca de ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’ porque él de “aburrido” no tiene nada de nada. Superado el mal trago de la expulsión, Pepe ha comunicado a sus candidatos que se iban de viaje a Lisboa y ha vuelto a reinar el buen rollo. “Lisboa, ¿dónde está Lisboa?”, ha asegurado Lomana.

David y Cristina, una expulsión de mutuo acuerdo y con mucho flow

Tras una larga conversación con su madre, David ha pedido a sus chicas que se pusieran en pie para comunicarles una decisión importante y por primera vez, ha sido una decisión que ha gustado mucho a todo el mundo. A David no le gustó que Cristina no le guardara el secreto de sus besos en la piscina y ha decidido decirle adiós. Una decisión que a la candidata le ha parecido perfecta porque ella también se había dado cuenta de que él no le gustaba nada de nada.

Cuando la Cuqui se va algo se muere en el alma

Haciendo gala de su verborrea, Fernando ha tomado la decisión de despedir a una de sus “concejalas” antes de partir rumbo a Biarritz, una ciudad hermanada con Jerez de toda la vida. Cuqui se ha convertido en una gran amiga de Fernando, pero por ella no ha sentido la atracción sexual que tiene con Marimar y con Raffaela, y ha decidido decirle adiós. Cuqui se ha roto durante unos minutos, pero rápidamente ha tenido claro que Fernando se iba a quedar solo para toda la vida.

Jaime sigue pensando con las “neuronas”: Bye, bye Sara

Jaime ha llevado a sus chicas y a su madre al parque donde llevaba a sus conquistas cuando era adolescente para darles una noticia y un disgustazo a su madre. El soltero estaba a punto de emprender un viaje a Teruel, la ciudad del amor española, y Sara no podía acompañarle. María no podía creer lo que estaba sucediendo y ha querido que su hijo se lo pensara un poco más, pero el soltero tenía clarísimo que a las chicas que quería seguir conociendo eran Bárbara y Sonia.