Erik y Camelia suben la temperatura de '¿QQCCMH?' con un sensual momento en el spa: "Tengo muchas ganas de dormir contigo"
El momentazo de Camelia con Erik interrumpiendo el sensual encuentro: "Tienes pinta de roncar"
Camelia, a Erik: "Qué rápido te quitas tú la ropa, ¿no?"
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Erik y Camelia han vivido un momento muy 'subido de temperatura' durante la entrega de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?' de este lunes. Por si ya no había tensión sexual entre esta pareja, su cita ha sido nada más y nada menos que en un spa. Además, Camelia tenía preparada una sorpresa para el hijo de Mari Carmen que le iba a pillar totalmente desprevenido. "Qué bonito esto, ¿no cariño?", señalaba la pretendienta.
Camelia se quitaba el albornoz y le recordaba a Erik que había competido en Bikini Fitness, llegando a ser campeona de España y del Mundo: "Te voy a hacer un poco de poses". Erik atendía impresionado el show de Camelia en el spa, confesando que ese momento le había dejado "sin palabras". Sin duda, lo que más le gustaba a Erik era el trikini que llevaba Camelia, diseñado exclusivamente por ella.
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El momentazo de Camelia
Erik tuvo que evaluar el espectáculo y el hijo de Mari Carmen no se lo pensaba: "Lo has hecho muy bien. Yo te daría un diez, sobre todo por el trikini". Camelia le pedía a Erik algo parecido y este no tardaba en quitarse el albornoz: "Qué rápido te quitas tu la ropa, ¿no?". Miradas cómplices, sensualidad y sobre todo, calor. Mucho calor. Finalmente, cogían cada uno un vaso de champán y se pegaban un caliente chapuzón en el spa.
Después de brindar, Camelia nos dejaba un momentazo confesando que "del agua comenzó a hervir y a salir humo". Y razón no le faltaba. "¿Ahora qué hacemos entonces?", preguntaba Erik. "Pues qué vamos a hacer. Luego sigue la noche, ¿no?", preguntaba Camelia. "Tengo muchas ganas de dormir contigo...", decía Erik, siendo interrumpido por un "a ver si roncas", de Camelia. Para tranquilidad de esta, Erik confesaba que no roncaba. "Tienes pinta de roncar", aseguraba Camelia.
Finalmente, los dos se daban un sensual beso, demostrando la química que llevan teniendo desde que cruzaron la puerta del spa y desde el día que se conocieron. Camelia le cogía de la mano y llevaba a Erik a la habitación: "Detrás mía, que bien que te gusta...". Una noche seguramente inolvidable para los dos y donde la temperatura ha subido como nunca en '¿Quién quiere casarse con mi hijo?'.