En Afganistán, una mujer que pasa una noche fuera de casa sin el permiso del marido o del padre acaba en un reformatorio. Fátima tiene 16 años y está acusada de adulterio: "Me escapé de casa por motivos matrimoniales. Una familia había venido a pedir mi mano y como no estaba de acuerdo, escapé", nos cuenta desde el centro en el que pasará una condena de dos años y dos meses.