“La calle es la guerra, se matan por una botella de agua”: El grito desesperado de una española atrapada por el huracán Irma
Noticias Cuatro
11/09/201713:06 h.“Necesitamos ayuda, necesitamos que nos saquen de aquí”. Esta es la llamada de socorro de Sara Cerezo, una cordobesa que vive en San Martín desde hace dos años. El paso del huracán Irma ha dejado a la isla caribeña destrozada. “Estábamos dentro cuando pasó el huracán. Estamos vivos hoy pero si no nos sacan de aquí no sé cuánto vamos a aguantar”, explica la joven natural de la localidad cordobesa de Pozoblanco.
Narra la difícil situación que están viviendo en la isla: “La calle es la guerra, la gente se mata a tiros, cuchillazos por una botella de agua o un trozo de pan”. "La gente está desesperada porque no hay comida, no hay bebida, no hay gasolina y solo les queda matarse entre ellos para intentar salir de esta", recalca la joven.
"No hay 10 muertos, hay miles de muertos y están flotando los cadáveres en las calles, en el mar y en todos los sitios", señala Cerezo, quien pide desesperadamente que “vengan a por nosotros, a sacarnos, necesitamos que nos ayuden, no estamos seguros”.
“La información que estáis recibiendo no es verdad, la protección no es verdad, por favor, estamos desesperados”, reclama la joven.
Tras la difusión de las imágenes, el Consistorio de la localidad cordobesa, el alcalde del municipio cordobés, Santiago Cabello, ha contactado con la joven para conocer de primera mano su situación e intentar tranquilizarla y mantuvo este domingo un encuentro con el padre de la afectada, "para mostrar su apoyo a la familia e intentar contribuir a la salida de la isla de esta pozoalbense, residente en este enclave del Caribe por motivos profesionales".
El alcalde trasladó la situación a responsables de los ministerios del Interior y de Asuntos Exteriores, que a su vez han contactado con autoridades francesas y embajadas responsables de la zona afectada, tanto para conocer al detalle las gestiones que se están realizando para rescatar a los españoles atrapados en la isla.